Con un menú variado, ayer se reunió la Junta Directiva de la Unión Industrial Argentina (UIA) y se abordaron varios platos.
Entre ellos, los detalles del texto que la entidad firmó junto a la CGT ?al que adhirieron el ministerio de Desarrollo Productivo y el ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social?. “El acuerdo busca sostener la actividad productiva y el empleo en el marco de la pandemia, morigerando el impacto de la emergencia sanitaria en la actividad de las empresas industriales. A tales fines, se establecieron una serie de pautas como el pago del 75% del ingreso neto a los trabajadores que están impedidos de cumplir sus tareas habituales por la paralización de actividades y un límite de 60 días para las suspensiones ?que rige desde el 1° de abril inclusive? con la garantía de la continuidad en los puestos de trabajo durante el tiempo en que se haga efectiva la suspensión”, dijeron en la UIA.
Asimismo, durante el encuentro se dialogó sobre la negociación que el Gobierno está llevando adelante. La UIA manifestó el apoyo a la estrategia para la reestructuración y se ponderó la necesidad de una pronta resolución del problema de la deuda. “Un acuerdo con los acreedores resulta clave para generar un escenario previsibilidad macroecoconómica, promover la inversión privada y crear empleo. La recuperación del flujo de financiamiento internacional es un instrumento necesario para desplegar el potencial de la inversión productiva en todo el país”, dijeron los industriales.
Asimismo, se trató la postura de Argentina frente a las negociaciones que se están llevando adelante en el Mercosur. “Las autoridades de Junta Directiva coincidieron en la importancia de promover una política comercial que priorice el empleo regional, potencie la inversión productiva en los países que lo componen y resguarde el mercado común. Los funcionarios manifestaron que es indispensable fortalecer el rol del Mercosur a partir de una mirada estratégica que integre la salida de la crisis y el largo plazo, en función de una inserción internacional inteligente”, dijeron.
Sobre el presente fabril, los representantes regionales y sectoriales describieron el contexto de la actividad productiva en todo el país y las perspectivas para las próximas semanas. “Las dificultades en el acceso al crédito -en particular para el capital de trabajo- y los cheques rechazados fueron las principales preocupaciones mencionadas. Se ponderó la ampliación del Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción, y se puso de manifiesto la necesidad de garantizar el acceso a todas las empresas industriales”, agregaron en un comunicado.
