Con la industria y los comercios cerrados a causa de la pandemia, 12.609 personas fueron despedidas o suspendidas en el último mes. Además, 297.063 trabajadores se enfrentan ante un riesgo salarial, según un informe publicado hoy por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
Entre el 15 de marzo y el 15 de abril, identificaron 5.386 despidos y 7.223 suspensiones, totalizando 12.609 personas que se encuentran en situación de ruptura o riesgo de ruptura del contrato laboral.
Sin embargo, en la primera quincena de abril casi se duplicaron los casos comparado a marzo, pasando de 4.716 afectados a 7.893, por lo que todo apunta de que en abril las cifras serán peores.
En el sector privado, los despidos y suspensiones se dieron mayormente en el sector de servicios (58%), seguido por la construcción (19%), la industria (14%), el comercio (5%) y el sector primario (4%).
Por otro lado, 3.070 trabajadores se vieron afectados por un atraso de pago de salarios, 8.480 sufrieron suspensiones con reducción salarial, 54.030 cobraron menos y 231.483 personas llegaron a un acuerdo patronal o con el gremio para tener una reducción salarial. En total, 297.063 trabajadores vieron perjudicados sus bolsillos por la parálisis de la economía.
Lo que alerta es que en la primera quincena de abril se dio un salto exponencial de los casos. Si en marzo se registraron 9.830 personas afectadas, en abril el número creció a los 287.233 trabajadores.
En el sector privado, los casos de reducción salarial se dieron mayormente en la industria (79%), seguido por el comercio (11%), servicios (5%) y el sector primario (4%). En el caso de la construcción, se registraron 905 afectados, menos del 1%.
Respecto al rol de los sindicatos, el 87% ha intervenido en los conflictos que se dieron entre los empleados y empleadores. Como resultado, en el 45,2% de los casos hubo acuerdo entre las partes; en el 31% intervino el Ministerio de Trabajo, incluso dictando conciliación obligatoria y casi el 10% pidió intervención del organismo por incumplimiento del Decreto de Necesidad y Urgencia que prohíbe los despidos. Por último, en el 7,1% de los casos no se concretaron las bajas de contrato anunciadas o no hubo acuerdo aún.
“A pesar de la crítica situación por la que transita nuestro país a raíz de la pandemia del coronavirus, no se percibe en el período seleccionado una cantidad numerosa de casos de despidos”, analizó el CEPA. Y agregó que “en efecto, a primera vista resulta evidente que el decreto 329, publicado el 31 de marzo de 2020 ha tenido efecto”.
La situación general
Ante la parálisis de la actividad económica, el área de Research Grupo SBS realizó un recuento de los daños que provocó el aislamiento social en diversas variables.
Las exportaciones cayeron 11,6% m/m s.e. y 15,9% interanual en marzo con fuertes bajas de las ventas de Manufacturas de Origen Industrial (-20,5% interanual) y Manufacturas de Origen Agropecuario (-18,2% interanual).
A su vez, las importaciones cedieron 8,4% m/m s.e. y 19,7% interanul con importantes contracciones para las vinculadas a la inversión y los insumos para la producción.
A la vez, la Cámara del Acero reportó para marzo una caída de 26,7% interanual para la producción de acero y 23,9% interanual para la de hierro primario. Estimamos que estas cifras son consistentes con caídas de 29,1% y 19,2% m/m s.e., respectivamente.
Los datos de CAMMESA para la segunda semana de abril sugieren que el consumo de electricidad cayó otro 4,1% respecto de la primera, acumulando un descenso de 17,8% desde el inicio de la cuarentena.
A la vez, datos relevados por IARAF para los primeros 12 días de abril apuntan a una contracción de la recaudación del IVA de 27,9% interanual en términos reales.
Por último, la confianza de los consumidores medida por la Universiad T. Di Tella cedió 4,7% mensual en abril, cayendo con fuerza pero lejos de marcar un desplome tan significativo.
