En noviembre, la balanza comercial bilateral de bienes con Brasil arrojó un superávit de US$ 160 millones a favor de Argentina. Así, se revirtió el déficit de US$ 4 millones de noviembre de 2018. Más allá de esa dinámica positiva, no es por los “buenos” motivos.
En rigor, “obedeció al desplome de las importaciones (-25%)”, dijo Ecolatina, “ya que las exportaciones cayeron 8%”. Más allá del retroceso en nuestras ventas, agregó la consultora, “vale resaltar que fue la mitad que el resto de las importaciones brasileñas (-16%) de modo que la participación de Argentina en esa variable aumentó 0,5 punto, llegando a 6% en noviembre 2019”. Es decir, el 6% de las importaciones de Brasil provienen desde Argentina.
¿A qué se debe el bajón importador de Brasil? Dice Ecolatina: “La clave para esa evolución negativa fue la depreciación del real brasileño de 6,5% en el mes -en una economía con una inflación mensual menor a 1% y con bajo traslado a precios de los saltos cambiarios-, que mejoró la competitividad de la economía brasileña y encareció a nuestros productos que, constantes en dólares, se encarecieron en reales. Más allá de eso, para saber cómo afectará la depreciación del real al intercambio bilateral será necesario sumar su impacto en la actividad: si la mejora cambiaria del país vecino impacta positivamente en su actividad, es decir, si aumenta su demanda, la pérdida de competitividad relativa podría ser más que compensada por un avance de los volúmenes exportados”.
Así, en el acumulado hasta noviembre, la balanza bilateral de bienes marca un saldo favorable de US$ 820 millones para nuestro país. Al igual que en el resultado mensual, se observa una mejora notable en relación a igual período de 2018 (cuando había un déficit de US$ 4.200 millones).
También, al igual que en el resultado mensual del mes pasado, esa mejora responde a un marcado deterioro de las importaciones (-38%), dado que las exportaciones también retroceden en la comparación interanual (-4,3%). “Con el año casi cerrado, proyectamos que el superávit bilateral rozaría US$ 1.000 millones en 2019, alcanzando un pico desde 2002. De cara al mediano plazo, será fundamental saber si los vaivenes políticos -declaraciones cruzadas entre Alberto Fernández y Jair Bolsonaro- se transformarán también en tensiones económicas o si, como viene pasando por ahora, se quedarán en el plano discursivo. Considerando la delicada situación de nuestra economía, y los elevados vencimientos de deuda relevante en divisas en un contexto de mercados de crédito cerrados, será fundamental que las amenazas no se concreten (porque) de lo contrario, se cerraría una de las principales vías de escape a la crisis interna”, agregó Ecolatina.
A una conclusión llegaron desde Abeceb. “El superávit comercial de Argentina con Brasil acumula US$ 821 millones en los primeros 11 meses del 2019 y, a la misma altura del año pasado, el saldo resultaba deficitario para la Argentina en nada menos que US$ 4.324 millones, lo que implica una reversión de saldo comercial en términos absolutos de nada menos que US$ 5.145 millones. Con ese guarismo, Brasil explicaría aproximadamente el 30% de la mejora del superávit comercial total de Argentina que se encamina a los US$ 15.000 millones en todo 2019”, dijeron y proyectaron que el saldo bilateral terminará en US$ 1.000 millones a favor de Argentina.
El trasfondo de los últimos años es negativo para el comercio bilateral, que llegó a ubicarse en la zona de US$ 40.000 millones anuales. En 2019, siquiera llegará a US$ 20.000 millones. No es casual, por ende, que, como mencionara Abeceb, China haya desplazado a Brasil como principal socio. Tras la publicación del Intercambio Comercial Argentino (ICA) de octubre, dijo: “Considerando la suma de los valores importados y exportados, China ha sido por segundo mes consecutivo el principal socio comercial de Argentina, superando cualquier otro destino, gracias al salto exportador traccionado por las ventas de carnes que llevaron a que las exportaciones (a ese destino) hayan aumentado nada menos que 90% interanual en octubre”.
