El candidato a gobernador bonaerense por el Frente de Todos, Axel Kicillof, afirmó hoy que “la situación económica y social de Mar del Plata es una verdadera masacre a nivel laboral y de puestos de trabajo”, al aludir a los últimos índices del Indec.
Kicillof ofreció una conferencia de prensa en la tradicional confitería Tío Curzio, Colón y la Costa, acompañado por la candidata a intendente Fernanda Raverta y el primer candidato a diputado provincial Juan Pablo de Jesús.
Para revertir las cifras de desempleo y pobreza propuso “llevar a cabo una estrategia de desarrollo para la ciudad”.
Además apuntó contra el presidente Mauricio Macri y la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, a quienes tildó de “insensibles” y acusó a la mandataria de haberla visto “pocas veces en la calle cuidando los puestos de trabajo y la situación social”.
“En Mar del Plata los indicadores socioeconómicos están en estado muy crítico” dijo y agregó que “es imposible que le vaya bien a Mar del Plata con esta política económica”.
“Lo que a mí siempre me llamó la atención y que ahora en estos meses queda mucho más claro es cómo podía ser que la gobernadora Vidal, el gobierno de la provincia, fuera absolutamente insensible a esta situación“, añadió.
El ex ministro de Economía aseguró que “la provincia tiene instrumentos con su banco, con su Ministerio de Producción, para impedir que (las empresas) se cierren o terminen en quiebras y en desastre”.
“Es increíble la cantidad de veces que veo a la gobernadora en los carteles y las pocas veces que la veo en la calle cuidando los puestos de trabajo y la situación social”, dijo y agregó que eso “no se entiende, y es lo que deberían explicar, por qué nunca han hecho nada”.
“La caída de la demanda de los servicios que producen para el sector interno ronda del 30% porque este Gobierno se ocupó de la caída del salario. Necesitamos que cambie esta política", dijo.
Luego de la conferencia de prensa, Kicillof se dirigió a la plaza Italia, ubicada en la zona del puerto marplatense, donde miles de militantes lo esperaban para un acto partidario.