En un momento de medidas urgentes, trascendió que la semana pasada, el presidente Mauricio Macri firmó el decreto 591/19 que modifica el decreto 181, de Ley de Residuos Peligrosos.
La norma, modifica aspectos que los analistas y ONGs de medio ambiente consideran sustanciales de las restricciones que hay para importar basura para su uso industrial y puede implicar una mayor apertura para el acceso a desechos de todo el mundo, inclusive aquellos que pueden ser potencialmente peligrosos y contaminantes.
En la nueva normativa, se reduce el artículo 1° y elimina la descripción “ de todo tipo de residuos, desechos o desperdicio procedente de otros países, cuya nómina de carácter no taxativo se indica en el anexo I del presente decreto, simplificó la consideración de que es “Basura Peligrosa” y genera un campo abierto al ingreso de muchos residuos, flexibilizando la importación de basura.
Artículo 1º- ORIGINAL
Prohíbese el transporte, la introducción y la importación definitiva o temporal al territorio nacional, al área aduanera especial y a las áreas francas creadas o por crearse incluidos sus espacios aéreos y marítimos, de todo tipo de residuos, desechos o desperdicio procedente de otros países, cuya nómina de carácter no taxativo se indica en el anexo I del presente decreto.
“Artículo 1°.- MODIFICADO
Prohíbese el tránsito, la introducción y la importación definitiva o temporal al Territorio Nacional, al Área Aduanera Especial y a las Áreas Francas creadas o por crearse incluidos sus espacios aéreos y marítimos, de todo tipo de residuo procedente de otros países”.
Juan grabois, dirigente de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), esta vez le contestó desde una nota de opinión al respecto en el portal Infobae, titulada "Un inexplicable decreto de Macri", donde destacó: “La gerencia macrista facilita la importación de residuos afirmando que 'resulta innecesario un certificado de origen que acredite la no peligrosidad de los mismos'. Así, como leés. Vamos a gastar las pocas divisas que nos quedan para que algunos socios del Gobierno puedan importar alegremente la basura del primer mundo”.
"Tal vez crean que cuando los fabricantes de papel, plástico y cartón reemplacen por basura Made in USA los residuos sólidos urbanos que recuperan los trabajadores cartoneros llegará algún inversor benéfico a montar un emprendimiento de e-commerce para las decenas de miles de familias despojadas de sus fuentes de trabajo", ironizaba una vez más en su cruzada contra Mercado Libre.
En tanto, la Federación Argentina de Cartoneros, carreros y recicladores se refirió también a este decreto en un comunicado que fue dado a conocer vía redes sociales, en él marca como dato sobresaliente que “esta medida nos deja abiertos a ser el basural del mundo. Mientras hace un año China cerró la importación de estos residuos debido a que entre los materiales reciclables recibían todo tipo de residuos imposibles de ser procesados, Argentina abre sus puertas para recibir las miles de toneladas de basura que tienen acumuladas de los containers que les rebotaron del gigante asiático”.
En Argentina se estima que hay actualmente alrededor de 150.000 cartoneros sindicalizados que trabajan en basurales y en la calle.
