Por Luis Varela
De mayor a menor, con un clima muy tenso en la apertura y con más tranquilidad hacia el cierre, los mercados del mundo mostraron ayer una jornada por demás inestable, que estuvo atada a los amagos que se siguen haciendo entre Estados Unidos y China, en medio de una guerra comercial que ya se extiende por casi ocho meses.
En las primeras horas de negocios la pelea se iba agudizando y se profundizó la devaluación del yuan, que saltaba de 7,04 a 7,08 unidades por dólar, pero con el correr de las horas las variables cambiaron por completo su tendencia, tanto que la paridad entre ambas monedas terminó el día a 7,02 yuanes por dólar, con un nivel incluso inferior al del martes.
Más allá de eso, los analistas internacionales siguen pensando que el mundo se va orientando irremediablemente a una etapa más recesiva, y los valores de casi todas las variables se van poniendo en un paraguas, para buscar todo tipo de protecciones. Ayer, por ejemplo, tres países (India, Tailandia y Nueva Zelanda) resolvieron bajar sus tasas de interés, porque sus niveles de actividad se van ralentizando lentamente.
Paradójicamente, mientras el mundo baja sus tasas de interés, Argentina las sigue subiendo. Ayer hubo una nueva alza para la tasa de las Leliq: pagaron 63,157% anual promedio, con máximo del 63,290%. Y la tasa de los plazos fijos subió de nuevo: pagan 50% anual por plata chica y 55% anual por plata grande.
Por supuesto, esa sensación de que las economías van pisando el freno tiene directo impacto en el valor de las commodities, cotizaciones directrices que marcan el rumbo de los negocios en todas partes. Ayer mismo hubo una caída del 2,6% para el petróleo, hasta US$ 52,33 por barril, su menor precio de este año. Y, en línea con eso, el oro saltó 1,8% y llegó a US$ 1.500 por onza, su mayor precio en seis años y medio. Y la onza de plata trepó 4%, hasta su mejor precio en veinte meses.
Mientras tanto, los metales básicos estuvieron mixtos: el níquel saltó 3,3% hasta mayor precio en cinco años, el cobre mejoró 0,7% y el aluminio cedió 0,1%. En Chicago: el trigo repuntó 1,2%, el maíz subió 0,7% y la soja cerró sin cambios. En Rosario: suba del 2,4% para el trigo y mejora del 0,7% para el maíz. Y el Bitcoin escaló 2,5%, con panel mixto para el resto de las criptomonedas.
Con ese contexto, hubo cierre mixto en la Bolsa de Nueva York: el Dow cedió 0,1%, pero el S&P subió 0,1% y el Nasdaq ganó 0,4%. En las bolsas latinoamericanas el día fue positivo: hubo suba del 0,6% en la de San Pablo (por avance de la reforma previsional) y mejora del 1,6% en la de México.
En Argentina, por supuesto, se está jugando un partido completamente diferente. Mientras los Fernández cerraban campaña en Rosario y Macri hacía lo mismo en Córdoba, con una gran incertidumbre sobre el resultado que podrán tener las PASO, continúa una masiva compra de dólares, sobre todo de aquellos que cobraron sus aguinaldos, y están pasando sus posiciones por temor a que la oposición saque mucha ventaja en las primarias del domingo.
Así, mientras en el exterior el dólar subió 0,2% contra la libra y el mexicano y 0,1% contra el chileno, pero bajó 0,2% contra el yen a su menor valor en 16 meses (sin cambios contra el euro y el real), en Buenos Aires el billete verde sigue escalando: rozó los $ 47 y se acercó al récord de marzo de este año.
El tipo de cambio minorista oficial subió 32 centavos hasta $ 46,80 pesos, el blue subió 10 centavos hasta $ 46,50 (desde el cobro del aguinaldo se duplicó la demanda minorista de dólares), con el dólar mayorista 29 centavos arriba, hasta $ 45,59. Con este contexto, el BCRA operó mucho a futuro, pero en el contado perdió apenas US$ 56 millones de las reservas: quedan US$ 66.402 millones. Y con economistas como Mercedes Marcó del Pont advirtiendo que si hay una corrida “no van a alcanzan los dólares del FMI”. Pese a semejante afirmación, el riesgo país se mantuvo sin cambios en 897 puntos básicos. Y, medidos en pesos, la relación contra otras monedas también estuvo alcista: el euro subió 26 centavos hasta $ 50,97, la libra subió 20 centavos hasta $ 55,27 y el real subió 3 centavos hasta $ 11,46.
En el exterior los inversores presionaron con compras e hicieron subir a los bonos de México, Australia, Hong Kong, Italia y Brasil, pero con doble volumen y clima ultraselectivo, se profundizó la baja de los argentinos. El 82% de lo operado se transó en cuatro títulos: AY24 36%, TJ20X 21%, DICP 18% y TC21X 8%. Y en los extremos hubo alzas del 1% al 5% para los bonos TN20, AY24X, BDC20, PUO19 y AC17. Y retrocesos del 1,5% al 6,3% para los bonos TJ20Z, A2E8D, DICPC, TVPA, PARP, CUAP, DIA0D, TC21Z y BPLDD.
En la Bolsa de Buenos Aires, con más negocios ($ 843 millones), las acciones retrocedieron otro 0,9%. El 80% de lo operado en acciones se transó en ocho papeles: G.F. Galicia tuvo el 19% de los negocios, BYMA el 15%, Tenaris el 14% e YPF el 11%. Y con ese marco hubo subas del 1% al 3,1% para Fiplasto, Clarín, Loma Negra, YPF, Celulosa y Havanna. Y caídas del 3% al 5,2% para San Miguel, Comercial del Plata, Garovaglio, Longvie, Grimoldi, Phoenix, Transener, Telecom, Quickfood y Banco Patagonia.
Entre los ADR argentinos que cotizan en Nueva York sorprendió una suba del 1,3% para YPF, que mejoró su precio porque se derrumban las acciones del fondo buitre que litiga contra esa empresa argentina (la firma británica Burford Capital, una de las compañías más importantes de la bolsa londinense, fue acusada de fraude y sus acciones se desplomaron un 46%. Pero hubo caídas del 1% al 2,7% para Telecom, Irsa I, Galicia, Globant, Pampa E y Cresud.
Más colocaciones
Por otra parte, el Gobierno porteño, a través dell Ministerio de Economía y Finanzas encabezado por Martín Mura, emitió este miércoles una Letra del Tesoro con un vencimiento a 119 días, completamente en pesos y con una estructura similar a la de un bono dual, que ofrece una cobertura ante una eventual suba del tipo de cambio. Es la segunda oportunidad en que el Tesoro de la Ciudad emite este tipo de instrumentos. La emisión llevada a cabo registró 394 órdenes. Si bien la Ciudad apuntaba a tomar financiamiento por aproximadamente $ 5.000 millones, sin embargo en la subasta se recibieron ofertas por un monto total de $ 10.900 millones, que finalmente posibilitaron comprimir la tasa de interés y tomar financiamiento por $ 6.000 millones a una tasa de 50% nominal anual. Y al mismo tiempo se anunció que luego de las elecciones primarias, el Gobierno lanzará Letras del Tesoro: el próximo miércoles las emitirá por $ 1.250 millones, a 182 días de plazo que serán suscriptas por el Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte (FFSIT). Las nuevas Letras tienen como fecha de emisión el 14 de agosto de 2019 con un plazo de 182 días, por lo que el vencimiento será el 12 de febrero de 2020. La amortización será íntegra al vencimiento y devengarán intereses trimestrales a la tasa Badlar (tasa especial para depósitos de más de un millón de pesos) para bancos públicos.
