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Poco y nada: Brasil crecería 1% en 2019

11 junio de 2019

Por decimoquinta semana consecutiva, los analistas del mercado, cuyas proyecciones económicas releva semanalmente el Banco Central de Brasil para elaborar el informe Focus, corrigieron a la baja su pronóstico de crecimiento para 2019 que pasó de 1,13% a 1%. Se trata de un porcentaje inferior al registrado el año pasado y deja en claro que el gobierno de Bolsonaro no logra generar confianzaporque tiene dificultades para concretar las reformas estructurales. En el primer trimestre del año, la economía tuvo una contracción de 0,2%.Las perspectivas no son alentadoras porque también se ajustó la suba esperada del PIB en 2020 de 2,50% a 2,23%.

Fue abrupto el cambio en el pronóstico para la producción industrial, que bajó más de un punto, de 1,49% a 0,47%, aunque se mantuvo en 3% la expansión proyectada para 2020.

En materia de inflación, la situación es más favorable porque la suba esperada en el Indice de Precios al Consumidor Amplio se corrigió de 4,03% a 3,89%, un nivel inferior al tasa central de la meta de inflación que es de 4,25%. En ese contexto de estabilidad, los analistas estiman que la tasa Selic se mantendrá en 6,50% durante este año y tampoco hubo variaciones en materia cambiaria y la cotización del dólar esperada para el cierre de 2019 se mantuvo en 3,80 reales. El dólar está ahora más cerca de 3,90 reales (ayer cerró a 3,8838), pero su evolución dependerá, en buena medida, de lo que ocurra en el mercado global de divisas.

El superávit estimado de la balanza comercial pasó de US$ 50.500 a US$ 50.140 millones. A su vez, en el plano fiscal, el desequilibrio primario pronosticado se corrigió de 1,37% a 1,30% del producto, pero subió en el caso del resultado no minal de 6,20% a 6,38%.

Para Argentina, el pobre desempeño de la economía de Brasil es una mala noticia porque se trata de su principal socio comercial y se esperaba que tuviera un papel importante en la recuperación de la economía local, pero eso no ocurrirá este año. Y se sentirá, especialmente, en la actividad manufacturera porque la industria argentina es proveedora de la brasileña en muchos sectores.

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