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La cuenta regresiva en el financiamiento

10 junio de 2019

Por Ruth Remesnitzky Consultora Lazos Comerciales

Dicen que la ilusión es lo último que se pierde, y las pymes aún tienen esperanza de que los que lideran, en algún momento, puedan entender las urgencias financieras que tienen las pequeñas empresas de nuestro país. Es decir, que deje de ser un discurso político y se convierta en un hecho real en el mercado.

Difícilmente pueda transmitir en palabras el sentir de los dueños de pymes que me expresan a diario su desazón, descrédito, bronca e impotencia, de ser los que mueven la economía y siempre pagar los costos.

¿Recuerda que de niños jugábamos a 1, 2, 3 cigarrillo 43, y nos quedábamos como estatuas y el que se movía perdía? Es lo que pasa en la actualidad. Todo está inmóvil y sin respuesta, salvo de los que todos los días salen a pelearla y seguir apostando a que en algún momento mejore. Tristemente ya hablar de tasas de más de 50% resulta normal, y es insostenible cualquier negocio con estos costos.

Días atrás, un cliente me expresaba: “¡Como puede ser que tengamos que esperar hasta octubre para ver qué pasa y recién ahí repensar nuestro negocio! Y a esto súmale las incertidumbres de cada rubro, las estacionalidades en las ventas, los costos, los empleados, etcétera. Necesitamos urgente capital de trabajo a un año como mínimo, costos financieros totales adecuados, flexibilidad y reglas claras que se apliquen con transparencia para permitirnos que se reactive el movimiento comercial. Pero por favor que nos digan la verdad, y no que cuando vas al banco o entidad termina siendo otro costo financiero total. ¿Existe alguien que nos vea, y se ponga en nuestros zapatos?”. Sumado a eso se restringió sustancialmente el otorgamiento crediticio, y la aprobación de calificaciones, más allá de la solvencia y garantía que posea la empresa. Hay carpetas que están meses para ser aprobadas sin justificación alguna. En parte por el incremento en la mora, además de que atrás hay decisiones de autoridades en cerrar el grifo hasta que se vea qué pasa en Argentina con las elecciones. Vayamos a los fríos números, las tasas de interés siguen altas, en pesos fijas son casi inexistentes y la gran mayoría pasó a tasa variable. Algunas referencias de mercado de lo que existe vigente frente a las necesidades crediticias de su empresa.

Descubierto. TNA 74%-90%

Descuento de cheques de pago diferido. TNA 55%-73% acorde al plazo. Es posible encontrar en algún banco público tasas del 34%43%, pero tiene ciertas restricciones y alta reciprocidad o realizan un mix entre la tasa bonificada y la de mercado.

Préstamos en pesos. TNA entre el 60% y 90%, pudiéndose bajar a 43%-53% acorde al plazo, escala, requisitos, actividad y en algunos casos con SGR.

Préstamos en dólares. Entre 5% y 10% para exportación o actividades que cobren en dólares.

Tarjetas pymes y rurales. TNA entre 63% y 77%, excepto algunos que está en 40-50%.

SGR y/o descuento de cheques en Bolsa. TNA entre el 4045% más la comisión entre 3%4% y otro 1,5% para agente de Bolsa y Caja de Valores. Plazo hasta 360 días.

En el último tiempo, las SGR y fintech fueron las estrellas protagonistas de la crisis por la gran diferencia de tasas y agilidad en otorgamiento. Pero esto fue cambiando y actualmente tanto los bancos como los proveedores ofrecen a sus clientes operar con sus SGR, lo que les permite retener a sus clientes.

¿Qué hacer durante esta parálisis financiera?

1- Siga renovando las calificaciones en los canales bancarios y financieros que tiene, y transmítales sus necesidades actuales y futuras.

2- Abra nuevos canales de financiamiento: proveedores, financieras, SGR, opere en mercado de capitales (Obligaciones Negociables, pagarés), etcétera.

3- Pida asesoramiento externo para tener otra mirada de su estructura Pyme (económica-financiera) para potenciar su negocio.

4- Alinee las estrategias productivas, comerciales, impositivas y financieras. Esto le permitirá ahorrar costos y encontrar donde agregar valor.

5- Escuche a los miembros de su empresa y desafíelos con objetivos cruzados entre áreas donde trabajen conjuntamente, a fin de incrementar la rentabilidad y reducir costos. Los cambios vienen de adentro para afuera, así cuando llegan las oportunidades no pasaran de largo y podrá verlas.

6- La actitud lo es todo y, como dice Víctor Küppers, V = (C + H) x A. Valor personal y profesional = (Conocimiento + Habilidad) x Actitud, donde el conocimiento y la habilidad suman, pero la actitud multiplica, y con esto me refiero a la actitud individual y conjunta de la empresa. Esa energía que moviliza a lograr resultados, ese clima que uno percibe en el aire cuando ingresa a una oficina, que se transmite en los gestos y la satisfacción de trabajar en una empresa que estamos orgullosos de formar parte, y esto es responsabilidad de todos y cada uno de nosotros.

También, sepa que siempre hay algo que aprender, revisar y comprender. Que el “tener razón” o el “siempre se hizo así” es enemigo del consenso, equipo y evolución como empresa. Porque la comunión y el logro colectivo es más gratificante, redituable y a largo plazo, que los éxitos individuales.

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