De acuerdo con el Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (Isac) expuesto ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) correspondiente a abril, el cuarto mes del año presentó una caída de 7,5% respecto al mismo mes del año pasado y acumuló un descenso de 10,3% en comparación con el mismo período de 2018. A la vez, respecto al mes previo, el dato de abril indica una baja de 2,6% en la serie original y una variación negativa de 0,3% en la medición desestacionalizada.
No obstante, según los datos del Indec, el índice serie “tendencia- ciclo” registró en abril una variación positiva de 0,6% respecto al mes anterior. Además, analistas económicos consultados señalaron que, al igual que en la industria, estos datos se comparan con niveles muy altos, previos a la recesión que inició el año pasado, y destacan que la caída interanual de abril fue bastante menor a la de marzo, que se contrajo 12,3% respecto al mismo mes de 2018.
Adicionalmente, aseguraron que las perspectivas son buenas debido al crecimiento de 36,5% respecto a marzo y de 16,2% interanual en las superficies solicitadas para permisos de edificación, las cuales suelen anticipar la dinámica del sector con un rezago de alrededor de seis meses, que en el acumulado del primer cuatrimestre mostraron una suba de 1,2% en comparación con el mismo período del año pasado.
Por otro lado, el desempeño interanual en los insumos para la construcción presentó cierta mejora respecto a hace un año atrás, mostrando crecimiento en tres de los diez insumos y una atenuación en gran parte de las caída del resto. “En particular, se observó un buen desempeño de aquellos insumos que se relacionan con el inicio de la obra”, destacan los especialistas, en base al crecimiento de 3,4% hormigón elaborado y de 9,4% de yeso.
Sin embargo, según el informe del Indec, los resultados de la encuesta cualitativa de la construcción, realizada a grandes empresas del sector tanto de la actividad pública como de la privada, muestran expectativas desfavorables respecto al nivel de actividad esperado para el período comprendido entre mayo y julio. De esta encuesta se desprende que 54% de las empresas que realizan obras privadas prevé que el nivel de actividad del sector disminuirá durante los próximos tres meses, mientras que 40% estimó que no cambiará y 6%, que aumentará.
Entre las empresas dedicadas fundamentalmente a la obra pública, 57,1% opinó que entre mayo y julio el nivel de la actividad disminuirá, mientras que 38,1% cree que no cambiará y 4,8%, que aumentará. Respecto a la variación estimada para los próximos tres meses de la cantidad de personal ocupado, permanente y contratado, entre las empresas que se dedican principalmente a obras privadas, 60% prevé que no habrá cambios, mientras que 32% estimó una disminución de la nómina y 8% espera aumentarla. Entre los que se dedican a obras públicas, 52,4% cree que se reducirá, 42,9% estimó que no habrá cambios y 4,7% prevé que aumentará.
