La economía de la zona euro tuvo un desempeño mejor que el esperado en el primer trimestre del año. Registró una suba de 0,4% con relación al último cuarto de 2018 y de 1,2% contra el mismo período del año pasado.
En el caso específico de Francia la suba de 0,3% mientras que la expansión de España fue del 0,7%. Italia, por su parte, creció sólo 0,2% pero le alcanzó para salir de la recesión ya que la economía se había contraído en los dos trimestres anteriores.
Todavía no se conocieron los datos del PIB de Alemania pero su tasa de desempleo en marzo que fue de 3,2% anticipa números positivos para el nivel de actividad.
La tasa de desempleo en la zona euro en marzo fue de 7,7%, el nivel más bajo desde septiembre de 2008.
El crecimiento europeo fue inferior al de Estados Unidos que alcanzó a 3,2% en el comienzo del año pero sorprendió a los analistas. Y si a ello se suma la mejora en los indicadores que mostró China, los pronósticos sobre una fuerte desaceleración del nivel de actividad global en los primeros meses de 2019 no se concretaron.
