Las perspectivas económicas de Brasil se siguen deteriorando. Esa sería la síntesis del boletín Focus que publicó hoy el Banco Central con los pronósticos de los analistas del mercado. Como consecuencia de la suba mayor a la esperada del Indice de Precios al Consumidor Amplio en marzo, la proyección anual pasó de 3,90% a 4,06%, todavía por debajo de la tasa central de la meta de inflación del BC que es de 4,25%. De todas maneras, la tendencia alcista del IPCA no afectó los pronósticos en materia de interés porque la tasa Selic esperada para fin de año se mantuvo en 6,50%. Lo mismo ocurre en el plano cambiario, dado que al igual que en las últimas semanas, se estima que el dólar se cotizará a 3,70 reales al cierre de 2019.
A su vez, la proyección sobre el crecimiento del PIB fue corregida levemente a la baja de 1,97% a 1,95%. Pero la corrección fue mayor en el caso de la producción industrial que pasó de 2,50% a 2,30%. Según los analistas, la recuperación del nivel de actividad seguirá siendo muy moderada y a Brasil le está costando mucho volver a tener tasas de crecimiento elevadas.
Por otra parte, la balanza comercial mostrará un saldo positivo de US$ 50.140 millones, ligeramente inferior al pronosticado en el Focus anterior. En materia fiscal, también se observa un leve deterioro porque el desequilibrio del resultado primario pasó de 1,30% a 1,37% del PIB y el nominal de 6,22% a 6,30%.
Todas las proyecciones muestran un retroceso, y los países de la región, empezando por Argentina, deberán tener en cuenta que el impulso que vendría de Brasil para sus economías será menor al que esperaban hace unos meses.
