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El mundo se complica más y Argentina se sigue debilitando

El dólar subió en todas partes y de manera consistente en Brasil. Y en Argentina alcanzó otro récord, sin que aparezcan las ventas de los dólares del FMI ni tampoco los de la cosecha. Los bonos tuvieron un día aceptable. Pero las bolsas, especialmente las de Buenos Aires y San Pablo, sufrieron.

28 marzo de 2019

Por Luis Varela 

Con récord de camiones en el puerto de Rosario, a punto de empezar a trasladar la cosecha récord, y con el Banco Central operando a media máquina (sólo subiendo las tasas de interés y operando en el mercado cambiario de futuros, pero sin poder vender en el contado), el precio del dólar pegó ayer el mayor salto de los últimos tiempos.

La demanda siguió impulsando la cotización del billete verde: el tipo de cambio oficial minorista subió $ 1,25 hasta $ 44,92, el blue subió $ 1,45 hasta $ 44 y el dólar mayorista subió $ 1,23, hasta un nuevo récord de $ 43,87. Y con este movimiento el valor mayorista se acerca por primera vez a la mitad de la banda cambiaria: al cierre de ayer estuvo $ 4,58 arriba del piso y $ 6,97 abajo del techo.

Por la incertidumbre económica global, los inversores buscaron refugio, una vez más, en los bonos del Tesoro de EE.UU.

Mientras el Gobierno le echa la culpa del movimiento a cuestiones políticas y a factores de la economía mundial, la mayor fortaleza que tuvo ayer el dólar se disparó por dos razones bien precisas: por un lado, se conoció que la venta de los dólares del FMI se retrasa diez días, hasta el 15 de abril. Y por otra parte, sigue sin iniciarse la fuerte liquidación de granos: ayer hubo más demanda de silos bolsa, los productores estudiarán muy bien en qué momento dejarán sus dólares.

A su vez, los inversores globales buscaron seguridad. Por eso, los bonos de Estados Unidos subieron en el valor contado y su tasa larga (a 10 años) bajó al 2,38% anual, el menor nivel en dos años y medio. En otros mercados, mientras tanto, hubo movimiento opuestos en los bonos: se destacó una durísima caída para los bonos brasileños, con fuerte suba para los bonos de Hong Kong y Nueva Zelanda.

Por eso, además del temblor cambiario que hubo en Argentina también hubo fuertes movimientos en otros mercados emergentes. El dólar saltó en Brasil de 3,87 a 3,99 reales y en México subió de 19,11 a 19,37 pesos. En Turquía, otro de los países que suele tener ataques de este tipo, la lira turca pudo defenderse, pero con un pequeño destalle: el Gobierno colocó una tasa overnight (24 horas) del 1.000%, por lo que habrá que ver qué sucede hoy jueves en ese mercado.

Por todas esas razones, en el exterior el dólar subió contra casi todas las monedas. Y el euro bajó contra el dólar a su peor nivel de los últimos 21 meses.

Argentina no tuvo tasas del 1.000% como Turquía, pero los intereses siguen creciendo. El Banco Central subió otro punto la tasa de las Leliq: pagó 68,29% anual promedio y un pico del 68,5%. Y los bancos subieron la tasa de los plazos fijos grandes hasta el 47% anual, y por plata chica pagaron 43%.

Y atención que estos movimientos están generando efectos secundarios. El Banco Central sigue perdiendo reservas: ayer bajaron en US$ 314 millones, hasta US$ 66.866 millones.

La reacción de todos estos cimbronazos en los papeles públicos y privados es disímil. Ayer hubo bajas del 0,1% al 0,6% en los índices de las bolsas de Nueva York. A su vez, se vio un desplome del 3,6% en la Bolsa de San Pablo por cuestiones de política interna y una suba del 0,3% en la de México.

La Bolsa de Buenos Aires tuvo ayer otro día muy malo. Con $ 732 millones operados, el índice Merval bajó otro 1,4%. El 80% de lo operado con acciones se transó en once papeles: G.F. Galicia tuvo el 22% de los negocios totales y Petrobras Brasil el 10%. En los extremos se vieron subas del 1% al 3% para Tenaris, Aluar, Ternium, TGN, Telefónica e Indupa. Con caídas entre el 3% y el 8% para Caputo, Semino, Clarín, Carboclor, Phoenix, Patagonia, San Miguel, Edenor, Colorín, Esmeralda, Central Puerto, Costanera y Macro. Mientras que entre los ADR argentinos que cotizan en Nueva York hubo bajas para Macro, Irsa I, Edenor, Pampa E, Francés, Galicia, TGS, Cresud, Telecom, Globant, YPF, Irsa P y Ternium.

A los títulos públicos, en cambio, les fue un poco mejor. Hay operadores que los consideran con precios de liquidación y algunos inversores arriesgados se animan a tomar posición. Ayer, en promedio, los bonos argentinos recuperaron 0,4% y volvieron a la zona piso de los últimos tres años: con el riesgo país en 781 puntos. El 82% de lo operado en bonos se transó en tres papeles: AY24 64%, AO20 12% y DICA 6%. Y en los extremos se vio un salto del 7,9% para el bono CEDI y subas del 2% al 5% para los bonos AA26, PUO19, BDC20, PUM21, A2J9, BPLD, PARY, DICY,AC17 y PARA. Y una baja del 2 al 3,6% para los bonos AA37D, DICAD, CUAP, TVPA, AO20D, AO20C, DICAC, TO26, AY24C, AA22, AY24D y AA25D.

Finalmente, el panel de commodities estuvo bastante tranquilo. Hubo una baja del 1% para el petróleo: el barril cedió hasta US$ 59,40. Los metales preciosos también estuvieron en baja: el oro cedió 0,5% y la onza de plata perdió 0,9%. Los metales básicos actuaron mixtos: el aluminio subió 0,1%, el cobre bajó 0,2% y el níquel cedió 0,4%. En Chicago los precios fueron mixtos: el trigo subió 0,1%, el maíz bajó 0,9% y la soja cayó 1,4%. En Rosario también mixtos: el girasol subió 0,9% y el maíz subió 0,8%, pero la soja bajó 2,3%. Y por último el bitcoin rebotó 2,3%, con posición firme para el resto de las criptomonedas.

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