Como era previsible, Donald Trump dedicó un parte importante de su discurso en las Naciones Unidas a cuestionar las políticas comerciales de otros países y a defender sus iniciativas.
Durante su gobierno, Trump se alejó de los acuerdos multilaterales que consideraba negativos para los intereses estadounidenses e intenta llevar adelante negociaciones país por país con resultados dispares. La ronda de conversaciones entre Estados Unidos y China que iba a comenzar se frustró y a partir del lunes entraron en vigencia la suba de aranceles que se impusieron recíprocamente.
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Con Europa, el principal socio comercial, hay muchos temas en la agenda y muchas negociaciones por delante. Con México hubo acuerdo mientras que se sigue negociando con Canadá para ver si los tres países firman un nuevo tratado este año. También se logró una acuerdo con Corea del Sur y esto permitió que muchos analistas sostengan que no es impensable que se logre un acercamiento con China.
La presentación de Trump en las Naciones Unidas fue una ratificación de las políticas comerciales seguidas hasta ahora y por lo tanto no cabe esperar cambios significativos y reiteró que “Estados Unidos nunca pedirá disculpas por defender a sus ciudadanos”. Uno de los oradores posteriores a Trump fue Emmanuel Macron, que alertó sobre los riesgos de cierto nacionalismo y destacó las ventajas de los acuerdos multilaterales.
