Ayer, la empresa multinacional estadounidense PepsiCo anunció que comprará la compañía israelí SodaStream por US$ 3.200 millones. SodaStream fábrica máquinas que permite a los usuarios carbonatar agua potable para crear soda.
Según informó la agencia de noticias Reuters, PepsiCo, con sede en Nueva York, financiará el acuerdo con efectivo disponible y se ha comprometido a mantener SodaStream en Israel durante al menos quince años. A su vez, la compañía estadounidense señaló que la operación fue aprobada por unanimidad por los directorios de ambas empresas y debería cerrarse en enero de 2019. En este sentido, cabe resaltar que PepsiCo pagará US$ 144 por acción en efectivo, lo que representa una prima de 10,9 % al precio de cierre del viernes de las acciones de SodaStream en Estados Unidos, y una prima del 32% a su promedio de treinta días.
Motivos
Según trascendió, la compra obedece a una estrategia de diversificación del negocio. Tan es así que los productos de SodaStream, se presentan como una alternativa más saludable y nutritiva con respecto a los refrescos azucarados. En este sentido, Ramón Laguarta, jefe de operaciones globales de PepsiCo, resaltó: “SodaStream complementa el negocio de agua de PepsiCo que incluye Aquafina y las marcas más pequeñas Bubly y Lifewtr. Es atractivo porque está creciendo rápidamente y permite a las personas personalizar sus bebidas”.
A su vez, señaló que SodaStream se beneficiaría de los recursos de PepsiCo en investigación y desarrollo, diseño y distribución, y confesó que “PepsiCo había mantenido conversaciones con SodaStream varias veces en el pasado, pero quería asegurarse de que su negocio fuera sólido antes de llegar a un acuerdo”.
