Después de muchas idas y vueltas, la CGT confirmó la fecha del anunciado paro general: será el lunes 25 de junio. La decisión fue comunicada por los triunviros Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña tras la reunión del Consejo Directivo y luego de la suspensión de la reunión que tenían programada con el Gobierno para discutir el pliego de cinco puntos que la central le había presentado a los funcionarios la semana pasada. "El paro será sin movilización", dijo Schmid, aunque se espera que los gremios más combativos llamen a marchar.
Los ejes principales de la protesta serán el rechazo a la política económica del Ejecutivo (incluido el acuerdo con el FMI), el pedido de paritarias "sin techo" ante la escalada inflacionaria y la pérdida de poder adquisitivo, el reclamo de un cese de los despidos hasta fin de año, la exención del pago de Ganancias para el próximo medio aguinaldo y la eliminación de los cambios a la Ley de Contrato de Trabajo incluidas en los proyectos de reforma laboral.
"Hemos decidido declarar para el 25 de junio un paro de actividades de 24 horas", comunicó Daer. Y fundamentó: "La debacle económica que estamos viviendo tiene que ver con la caída del poder adquisitivo". "El acuerdo con el FMI no es para festejar. Mientras anuncian un importante ajuste, pierden los que menos tienen", criticó el secretario general del sindicato de Sanidad.
"La debacle económica que estamos viviendo tiene que ver con la caída del poder adquisitivo", dijo Daer
Además, Daer planteó que "no podemos tener un nuevo techo (a las paritarias) cuando todos están hablando de una inflación que va a superar el 25%".
Todo indica que las CTA se plegarían a la convocatoria. Desde los sectores que conducen Hugo Yasky y Pablo Michelli, habían criticado a la central mayoristaria por no definir el día de la huelga.
La decisión había sido postergada la semana pasada. La fecha prevista para el anuncio era el jueves pasado, pero el encuentro concretado unas horas antes con funcionarios de primera línea del Gobierno -que les anunciaron a los sindicalistas la decisión de autorizar subas extras del 25% a través de un DNU- logró postergarlo. Sin embargo, la presión ejercida por los sectores más confrontativos para apurar la convocatoria y el anticipo del ministro de Trabajo, Jorge Triaca, de que no se concedería un freno a los despidos ni se eximiría el medio aguinaldo del pago de Ganancias, dejó a la CGT sin alternativas.
Por eso, la mesa chica cegetista decidió cancelar la reunión con Triaca pautada para este mediodía y fijar la fecha de la huelga.
