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“Hay que cambiar la forma de hacer agricultura de precisión”

El Economista dialogó con Leandro Sabignoso, CEO y cofundador de la startup Auravant

27 octubre de 2017

Por Eliana Esnaola

Leandro Sabignoso es uno de los profesionales argentinos que se animó a dejar el mundo corporativo para incursionar en una agtech de big data. El Economista dialogó con Sabignoso, quien hoy es CEO y cofundador de la startup Auravant, para conocer qué ofrece la agtech y el proceso de construcción.

¿Qué es Auravant?

Es una startup  de Big Data para el agro que provee herramientas informáticas a productores y asesores para facilitar la adopción de agricultura de precisión. Nuestras aplicaciones utilizan algoritmos de inteligencia artificial que analizan imágenes aéreas y otros datos útiles para el productor, generando alertas y recomendaciones de uso de fertilizantes y herbicidas.

¿Cuáles son los servicios?

Tenemos una plataforma que se llama Zoom que es muy sencilla de usar y gratuita, en la cual los asesores pueden dibujar sus lotes e ir obteniendo información a medida que hay nuevas imágenes satelitales. Procesamos la información satelital y la mostramos de una forma simple para que ellos puedan comparar e ir viendo los eventos agronómicos que ocurren, si tienen algún problema con malezas o si se les inundó alguna parte del campo, entre otras cosas. Decidimos realizar una plataforma gratuita porque creemos que hay que cambiar la forma de hacer agricultura de precisión, ya que hoy está limitada a unos pocos o a esas empresas de gran tamaño que pueden solventar determinadas plataformas. Además, disponemos y seguimos desarrollando herramientas que se montan sobre Zoom, como es el caso de Plena, una aplicación para fertilización variable que en el momento de hacerlo ayuda a determinar la cantidad óptima de fertilizante. Otra herramienta que estamos a punto de lanzar es sobre aplicación de herbicidas, que ayuda a determinar "cuanto y donde" aplicar,  y el "cuando" lo deciden los agrónomos. El productor ahí si, nos puede contratar.

¿En qué se beneficia el productor?

Ahorra insumos y mejora sus rindes significativamente, al tiempo que reduce el impacto ambiental.

¿Cuál es el alcance?

Hoy no estamos limitando el alcance, pero es posible que lo hagamos porque el foco está puesto en Argentina principalmente. Aunque en los próximos meses tenemos pensado abrir una pequeña operación en España como puertas de una futura expansión. Nos ayudaría a tener cultivos, cuando aquí no hay porque estamos en el hemisferio sur, y en el hemisferio norte es justamente opuesto, con lo cual eso nos permitiría tener todo el negocio funcionando.

¿Cuándo nace la agtech?

Hace tres años que arrancamos con Auravant, y hace un año y medio que empezamos a poner más foco en lo que hacemos ahora. Comenzamos con drones y cambiamos la visión a medida que fuimos viendo otros problemas que tenían los agricultores. Este año fuimos acelerados por Wayra, Nxtp.Labs y ya tenemos otro volumen, tanto en equipo como en clientes.

¿Cómo pasar de lo corporativo al emprendedurismo?

Somos tres socios, uno viene de trabajar en Bayer, vinculado al agro y los otros dos, estuvimos en Telefónica. Venir del mundo corporativo te da ventajas, saber como funciona una empresa grande y conocer por lo menos, donde querés llegar con un startup. Construirlo es otro tema. Las aceleradoras son las que te ayudan en ese proceso de construcción inicial que es tan difícil. Por ejemplo, Wayra además de brindarnos el espacio para trabajar e invertir dinero, nos ofrece servicios que normalmente una empresa grande tiene y ellos te lo dan en forma de consultoría incluido dentro de los servicios de aceleración. Para salir del mundo corporativo, hay que hacer lo que a uno le gusta, eso ayuda muchísimo. Nosotros queríamos emprender hace tiempo y decidimos hacer drones porque era algo que nos divertía y nos motivaba para hacerlo los fines de semanas y fuera del trabajo. Tiene que ser algo que te guste y te motive para poner ese esfuerzo adicional. Los tres somos ingenieros, así que nos pusimos objetivos muy cuadraditos de cuanto ir saltando. Creo que hace falta valor, pero también es importante medir los riesgos.

¿Cuánto dinero invirtieron?

Comenzamos con una inversión de US$ 50.000 que la fuimos poniendo gradualmente entre los socios. Luego, Wayra invirtió US$120.000 y Nxtp.Labs, US$ 25.000 y a partir de allí armamos una ronda de inversión con otros inversores externos que la estamos cerrando ahora. Son etapas, al principio siempre los propios emprendedores tienen que poner un poco de sí, después encontrás estas incubadoras y aceleradoras que te ayudan un poquito más y luego, empezás a armar las tradicionales rondas de inversión.

Los números de Auravant

Actualmente tiene 70 clientes y 40 mil hectáreas bajo monitoreo. Aspiramos terminar el año con 250 mil. Este primer año proyectamos facturar US$ 200 mil.

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