El Economista - 70 años
Versión digital

jue 28 Mar

BUE 22°C

Los efectos de la ausencia de Macri en la asunción de Bolsonaro

El Economista dialogó con analistas internacionales sobre la ausencia del presidente Mauricio Macri a la inauguración del nuevo mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, que será el próximo 1° de enero

13 diciembre de 2018

Mauricio Macri no asistirá a la ceremonia de asunción del presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro. La razón se debe a que Macri estará de vacaciones en el sur del país, para poder pasar las fiestas con su familia, y desea prolongar sus días de descanso. La asunción presidencial está fijada para el 1° de enero de 2019. Una semana antes, el canciller Jorge Faurie había anticipado que el Presidente iba a asistir, por la importancia que tiene el país vecino como el principal socio comercial argentino.

Algunos expertos consideran que esta nueva decisión se trata de un error. Pero también hay algunos que minimizan las posibles consecuencias negativas que la ausencia del mandatario argentino pueden generar.

Las visiones

"Está fijado por la Constitución de Brasil que los presidentes asuman el 1° de enero. Es una fecha complicada para todo el mundo. Alguna vez pensaron en modificarlo. Pero nunca se hizo, porque implica una enmienda constitucional. Yo no me adelantaría. De aquí a enero pueden variar mucho las cosas. Son solo dos horas y media de vuelo hasta Brasilia. Lo concreto es que otras veces ha ocurrido lo mismo. No sería la primera vez que un presidente argentino no asiste”, explica Juan Pablo Lohlé, exembajador argentino en Brasil durante ocho años. Cabe recordar que, al asumir la presidencia Dilma Rousseff en 2011, la entonces presidenta Cristina Kirchner no asistió al acto.

Pero tampoco hay que dejar a un lado la importancia estratégica que tiene Brasil para nuestro país, razón que justifica la presencia del jefe de estado argentino en el acto. “Es un error no asistir. Brasil es el aliado más importante que Argentina tiene en el mundo. A pesar del estancamiento del Mercosur, Brasil continúa siendo nuestro principal socio comercial, con el cual tenemos un importante nivel de integración productiva en un sector clave como el automotriz. Desde el retorno de la democracia, hemos construido una relación modelo en materia de seguridad y, por sobre todo, nuestra alianza con Brasil es indispensable para poder proyectar algún tipo de influencia en el escenario internacional”, dice el analista internacional Tomás Múgica, en diálogo con El Economista.

“El hecho de que (Macri) no vaya y eso se confirme, es un dato de la realidad, no más que eso. Es que el Presidente considera que puede no ir y mandar a un enviado especial en su lugar. Los efectos de esa actitud se verán después, ya sean positivos o negativos”, difiere Lohlé. Además, destacó el vínculo que el Gobierno ha establecido hasta ahora con Bolsonaro y sus futuros ministros: “Macri ya habló dos o tres veces con Bolsonaro por teléfono, y el canciller Faurie se reunió con Ernesto Araújo, el próximo canciller de Bolsonaro”.

Sin embargo, Lohlé coincide en la gran importancia que tiene Brasil para Argentina y en que es necesario profundizar esa relación, a través de la coordinación de agendas. “Hay una agenda neutra, porque Macri y Bolsonaro están reformulando la política del Mercosur. En ese sentido, van a tener que conversar. Es posible el acuerdo. Ambas partes le están cuestionando en parte lo mismo al Mercosur: quieren aumentar el comercio, lograr una mayor inserción internacional, y una mayor flexibilidad. Hay que ver cómo esas coincidencias se plasman en concreto. Hay que buscar aproximaciones en factores económicos, que incluya a los productores de varios sectores como la industria automotriz, o los alimentos, porque juegan un papel muy importante y no se los puede dejar de tener en cuenta”, afirma Lohlé.

Muchas veces se pone énfasis en las diferencias ideológicas entre el Presidente argentino y el futuro jefe de estado brasileño. Pero los analistas destacan la necesidad de cooperar y fortalecer las similitudes e intereses comunes, por sobre las diferencias que existan. “Más allá de los desacuerdos circunstanciales y los desencuentros personales, más allá de las orientaciones ideológicas de los gobiernos en uno y otro país, más allá de la necesidad de redefinir el proceso de integración que nos une, se trata de una relación que hay que preservar y acrecentar. Por eso que sería importante que el Presidente argentino esté presente en un acto de tanta importancia simbólica como es la inauguración de un nuevo gobierno en Brasil”, explica Múgica.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés