La mayor caída de la actividad en diez años motivó, lógicamente, críticas desde la oposición, entre otras, las de Marco
Lavagna y Fernanda Vallejos.
“9 de los 15 sectores productivos mostraron números negativos, y entre ellos se destacan la industria, la construcción y el
comercio, que representan 1 de cada 3 puestos de trabajo”, dijo Lavagna. “Hay suficiente evidencia de que el rumbo que
se tomó no sirvió, y está a la vista que, para que los argentinos vivamos mejor, necesitamos un giro de 180° en nuestra economía”, agregó uno de los pocos diputados economistas que tiene el Congreso.
“Si recordamos que el EMI descendió 8,1% podemos afirmar que la situación es compleja y de franco retroceso, y muestra que se ingresó en un proceso recesivo que se sabe cómo empieza, pero no como ni cuando se sale de él. Se trata del peor indicador desde 2009, en que, en pleno estallido de la crisis económica internacional, la economía se frenó fuertemente”, dijo Vallejos y concluyó: “Como era de esperar se hundió la actividad económica. Sigan con el circo no más, pero este desastre ni con malabaristas lo arreglan...".
