El Economista - 70 años
Versión digital

mie 24 Abr

BUE 13°C

Las consecuencias de un triunfo

El debate sobre la IVE polarizó a la sociedad (pero despolarizó a la política)

18 junio de 2018

Se suponía que el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), aunque por una mínima diferencia, no llegaría a aprobarse en la Cámara Baja y que, de todas maneras, nunca se aprobaría en la Cámara Alta. Pero ahora el escenario es otro. Y la posibilidad de que se convierta en ley es elevada. ¿Qué motivó ese cambio? Que la iniciativa a favor de la IVE ganó el debate en el Congreso y en la calle. Recibió un enorme apoyo en los segmentos más jóvenes de la sociedad que se movilizaron masivamente durante el tratamiento del proyecto.

Que además trascendió al tema del aborto y pasó a considerarse un hito más en la ampliación de derechos y en el avance de la agenda de género. Un movimiento que no todos los sectores políticos previeron y sorprendió a más de uno. Será difícil de desoír y seguramente condicionará a los senadores.

Otro dato del cual se hablará mucho es que los bloques no se definieron y cada legislador votó de acuerdo a sus convicciones, con independencia de su pertenencia partidaria. Algo que muy pocas veces ocurrió en Argentina y cuyo último antecedente fue el proyecto sobre matrimonio igualitario.

En la mayoría de los países la división de la sociedad sobre los temas culturales o sociales se superpone con las divisiones políticas. En Europa, los partidos conservadores se opusieron a la legalización del aborto mientras que los socialdemócratas lo impulsaron. En Estados Unidos, los republicanos son “pro-life” y los demócratas “pro-choice”.

Pero en Argentina, esos temas polarizan a la sociedad pero despolarizan a la política. Por eso, en la Cámara de Diputados se asistió a una división que no guarda ninguna relación con la que se produce en los temas políticos. Legisladores del PRO, el kirchnerismo y el PO votaron el mismo proyecto por la afirmativa y, del otro lado, peronistas, massistas, macristas y lilitos se sumaron por la negativa. Entre los legisladores, el corte más nítido no fue por género o procedencia geográfica sino por edad.

Lo ocurrido la semana pasada fue un tema puntual y los alineamientos políticos volverán a ser los de siempre, pero sirvió, al menos, para demostrar que a veces se demonizan adversarios con los que puede coincidir en otros temas. ¿O acaso el progresismo no se sintió interpretado por las palabras de la macrista Silvina Lospennato?

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés