Veintiún días pasó el presidente Mauricio Macri junto a su familia en el country Cumelén de Villa La Angostura. Vacaciones que se fueron extendiendo acorde a los compromisos políticos que podía asumir desde el Sur, como las reuniones con parte del Gabinete y los encuentros con gobernadores de la oposición. El descanso concluyó y a partir de hoy retomará la actividad desde la Casa Rosada con las reuniones de Gabinete y las de coordinación, estas últimas se realizan en conjunto con una cartera en particular: hoy le tocaría a la de Desarrollo Social y las económicas (Hacienda, Finanzas, Producción). A su vez, el mandatario recorrerá junto al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, las distintas obras de la Villa Olímpica en Villa Soldati para los juegos de la juventud que se llevarán a cabo en octubre de este año.
De a poco, se termina las vacaciones para la mayoría del Gabinete. Hay dos que se mantuvieron estoicos, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y Mario Quintana, vicejefe de Gabinete. Con el regreso de Macri, se normalizarán las reuniones de coordinación y también las ampliadas, que además de ministros incluyen a autoridades parlamentarias. De todas formas, será solo por una semana. Es que el Presidente emprenderá el próximo domingo la primera gira internacional del 2018. El primer destino será Rusia, para ser recibido en el Kremlin por Vladimir Putin. Vendrá luego el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza. Para esta parada, invitó a Rodríguez Larreta, que ya le confirmó su presencia, y espera por la respuesta de María Eugenia Vidal. El recorrido concluirá en Francia, en el que aspira a mantener un encuentro bilateral con su par, Emmanuel Macron.
El modus operandi sobre cómo avanzará el Gobierno con sus iniciativas durante este año, será uno de los temas que ocuparán la agenda de la Casa Rosada durante estos siete días. Dos ejemplos abrieron el debate. La demora de la reforma laboral generó un debate interno sobre que tan sólidos son los acuerdos con el peronismo y cuánto podrán avanzar este año desde el Congreso. El ejecutivo tanteó la recepción del “mega” DNU. Pese a haber recibido numerosos rechazos por parte de la oposición, no descartan mantener esta vía para posteriores proyectos.
