La economía de China creció nada menos que 6,8% en el cuarto trimestre de 2017 respecto al mismo periodo del año anterior, según datos oficiales publicados el jueves, difundió Reuters. Sin dudas, la cifra estuvo por encima de las expectativas.
Los analistas consultados por Reuters esperaban que el PIB aumentara 6,7% en el trimestre de octubre a diciembre, desacelerándose desde un crecimiento del 6,8 por ciento en el trimestre anterior.
“Los dirigentes chinos han estado tratando de contener los riesgos financieros y desacelerar una acumulación explosiva de deuda sin afectar el crecimiento económico”, agregó Reuters, y parece que lo están logrando.
Así, la segunda economía más grande del mundo creció 6,9% anual en 2017, superando el objetivo del Gobierno (aproximadamente 6,5%) y superando el crecimiento de 2016 (6,7%), que había sido el más débil en varios años.
Además, el PIB, en el cuarto trimestre, creció 1,6% intertrimestral, en comparación con un crecimiento revisado del 1,8% en julio-septiembre, dijo la Oficina Nacional de Estadísticas.
Así, la economía del Gigante Asiático está mostrando una resiliencia y capacidad para transformarse superior a la prevista por varios analistas.
