El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, fue uno de los oradores estelares de la Conferencia Internacional de Economía y Finanzas, que organizó ayer el Banco Ciudad. En un panel con Augusto De La Torre, Sebastián Edwards y Carmen Reinhart, que fue moderado por Ernesto Talvi, delineó su visión para 2018 y 2019.
Sobre el tan debatido gradualismo, Dujovne rompió con los esquemas y dijo que cuestionaba ese concepto: “Hemos hecho una gran baja en el déficit en simultáneo a una gran baja de los impuestos. En los dos últimos años hemos concebido al sector privado dos puntos de recursos con la eliminación de impuestos al comercio exterior y una parte de los ingresos personales. Sin eso nuestro déficit hoy sería, en vez de 4% del PIB, más cercano a 2%”, argumentó el ministro y señaló que “la política no es gradual sino que el problema es que atiende muchos puntos a la vez”.
Asimismo, Dujovne sostuvo: “No creemos en los megaplanes de los '80 donde un superministro diagramaba todo el futuro. Creemos más en la coordinación conjunta del BCRA, la política fiscal y el diálogo entre los distintos actores sociales”. Sobre las negociaciones salariales venideras, expresó la importancia de realizarlas “mirando la inflación para adelante, y no la inflación para atrás y teniendo en cuenta las metas del BCRA”.
El Rubicón
Al respecto del financiamiento del déficit, el ministro dijo que “Argentina va a hacer un pico de ratio de deuda en 2020 en 36% del PIB, un nivel más bajo que el de la mayoría de las economías y a partir de ese pico disminuirá”. Sin embargo, no descartó los riesgos a los que estamos expuestos de liquidez. “Tenemos un programa financiero que es grande y en buena medida debe financiarse del exterior ya que nuestro mercado de capitales es pequeño. Pero las líneas se cruzan. Estamos bajando el tamaño del programa financiero porque el déficit baja y el mercado de capitales crece. En 2019 ya vamos a tener un programa financiero mucho más chico y un mercado más grande. Buena parte de nuestro programa financiero se podrá cubrir localmente, pero todavía tenemos que cruzar el Rubicón de 2018. A partir de ahí, el riesgo de liquidez será mucho menor”, proyectó Dujovne.
Sobre el tan debatido gradualismo, Dujovne rompió con los esquemas y dijo que cuestionaba ese concepto: “Hemos hecho una gran baja en el déficit en simultáneo a una gran baja de los impuestos
“Necesitamos crecer para que los indicadores nos den buenos resultados. El objetivo es aumentar el crecimiento potencial de Argentina a 3% anual, lo que nos permitirá cumplir todas las metas fiscales. Si logramos llevar adelante este programa vamos a generar las condiciones para que Argentina sea un país desarrollado”, concluyó el ministro de Hacienda.
Más voces
Antes de Dujovne, también disertó Carmen Reinhart, profesora del Harvard Kennedy School. “Argentina estaba ausente de todos los índices y reentrar a esos índices implicó un gran apetito por emisiones de deuda. Hay que distinguir que esa reentrada no es algo que ocurra todos los años. La perspectiva debe ser cautelosa porque los mercados financieros globales siempre han sido volátiles en el apetito y ese punto dulce que tuvo Argentina no necesariamente se va a repetir”, advirtió Reinhart, que expresó que la regulación de los mercados financieros tiene que ser impartida por el Estado. “Argentina necesita aumentar su sistema financiero, que es muy pequeño, pero hay que ser macroprudentes”, señaló la profesora de Harvard. Sobre las tasas bajas hoy imperantes en las economías centrales, Reinhart argumentó que “el gran nivel de endeudamiento de los países desarrollados va a sostener las tasas bajas” ya que no hay margen para una fuerte suba.
Por su parte, Augusto De La Torre, ex Economista Jefe para América Latina del Banco Mundial, sostuvo que la región en los últimos quince años fue la única del mundo que redujo la desigualdad. Para De La Torre, América Latina pasó de “una zona de ingresos medios a una de clases medias” producto de esa caída de la desigualdad. Sin embargo, marcó que ese gran salto se debió al boom de los commodities y que el panorama ahora será más complicado. “Los países necesitan incrementar la producción de bienes transables y eso requerirá de mano de obra calificada. Veo difícil que el crecimiento continué bajando la desigualdad a partir de este punto. También la región necesita de una fuerte inversión en infraestructura”, concluyó De La Torre.
