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Herramientas de financiamiento en el mercado de capitales

Con buenas perspectivas hacia adelante, cada vez más empresarios comienzan a consultar por las opciones de financiamiento disponibles

12 septiembre de 2017

Por Matías Daghero Autor del libro “Con los $ que tengo, ¿qué hago?”

Luego de un 2016 muy complicado para la economía argentina en general y para las empresas pyme, empiezan a ser cada vez más visibles los signos de la recuperación económica. Los últimos números ya no sólo abarcan al sector agropecuario (como lo venían haciendo desde hace ya un tiempo) sino también a la construcción y a la industria, entre otros.

En medio de este contexto de recuperación y con la perspectiva de que las próximas elecciones pueden representar un punto de inflexión a partir del cual se empiecen a generar cambios estructurales, cada vez más empresarios comienzan a consultar por las opciones de financiamiento disponibles hoy, tanto para capital de trabajo como para inversiones en bienes de capital.

A nivel mundial, los mercados de capitales son la herramienta de financiamiento por excelencia para las empresas. Sin embargo, en la Argentina los bancos continúan siendo el principal canal de financiamiento. Esto hace subir el costo del financiamiento ya que el mercado bancario tiene más intermediarios.

Si este análisis lo llevamos a empresas pyme, incluso se observa un fuerte componente de financiamiento propio, frente a las dificultades para fondearse por otros medios. Esto genera que la velocidad en el desarrollo de las empresas sea más lenta y no permite la posibilidad de apalancamiento.

Quizás fruto del desconocimiento de los instrumentos que el mercado brinda, muchos empresarios y emprendedores no se acercan al mercado de capitales en busca del financiamiento tan necesario para la expansión de sus proyectos.

Instrumentos hoy

Comenzando por las herramientas de más corto plazo, los cheques de pago diferido permiten financiarse para plazos que van de los 45 a los 360 días. Aquí los costos son muy bajos y los requisitos mínimos, muy similares a los que se pide en un banco para abrir una cuenta. Las tasas varían según el mercado, encontrándonos hoy con una política de altas tasas por parte del BCRA que dificultan el financiamiento. Aquí, dependiendo del segmento podremos encontrar tasas de entre 26% y 30% anual. Estas son tasas más altas que las que estaban disponibles hace unos meses pero mucho más bajas que las de un descubierto bancario, por lo que el ahorro en materia de intereses que se puede generar para una empresa que esté constantemente haciendo uso del descubierto es más que importante.

Avanzando en plazos, el pagaré bursátil constituye una herramienta que permite financiarse por plazos que van desde los seis meses hasta lo tres años. Aquí una de las principales ventajas es que es un instrumento que se emite a descuento, por lo que el pago total recién se hará al vencimiento del mismo, sin tener que afrontar pagos parciales. Esto constituye una interesante herramienta para el caso de inversiones que demoren en la generación de flujos (caso típico de una compra de maquinaria). Los pagarés pueden ser emitidos tanto en pesos como en dólares, habiendo sido colocados a una tasa del 8% anual en dólares en promedio en el mes de agosto.

Por otra parte, la recientemente lanzada Obligación Negociable PYME permite la emisión de deuda que cotice en el mercado pero con costos mucho menores lo que hacen que una empresa pueda acceder desde montos bajos. Y esto es así gracias a que la garantía es provista por una Sociedad de Garantía Recíproca (SGR). Por citar un ejemplo de este instrumento, una de las últimas emisiones fue por US$ 4.000.000 por parte de Agroempresa Colón a una tasa del 6,9% anual en dólares.

Un instrumento para estructuras y necesidades de capital ya mayores son los Fideicomisos Financieros. Estos son recomendables para plazos que van desde los seis meses hasta los tres años. Aquí los costos de estructuración, asesores y colocadores encarecen el proceso por lo que debería tratarse de capitales que superen los $ 100 millones para reducir el impacto de los costos fijos.

Por último, la opción de abrir el capital emitiendo acciones en un momento en que los inversores internacionales están con apetito por las inversiones argentinas puede ser algo interesante. En ese camino se espera que en los próximos días esté abriendo su capital la cementera Loma Negra en el mercado local y la compañía de viajes Despegar en Wall Street.

Como se ve, el menú de opciones para financiarse es muy amplio. Aquellos empresarios que quieran financiar un proyecto pero que no sepan qué instrumento es el más conveniente no tienen más que acercarse a un ALYC de confianza (las anteriormente denominadas sociedades de Bolsa) y pedir asesoramiento, ya que la mayoría de ellos cuenta con un departamento de asesoramiento en financiamiento pyme.

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