A diferencia de lo que ocurre con la producción agropecuaria, la construcción o el patentamiento de autos y motos, las ventas en el canal minorista no logran despegar y muestran señales mixtas en un escenario en el que el poder adquisitivo de los consumidores tiene alguna recuperación en trabajadores formales pero corre de atrás a la inflación y el aumento de tarifas de servicios públicos entre los que se desempeñan en la economía informal o son cuentapropistas (autónomos o monotributistas).
Un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) asegura que “las ventas minoristas están tardando en recuperarse y en julio cayeron 1,6%” en cantidades, comparadas con el mismo mes del año anterior. Además, en el acumulado de los primeros siete meses del año hubo una contracción de 3% respecto del año anterior y se advierte una leve mejora del 0,8% el mes pasado en relación a junio, “aunque se registra mucha disparidad entre comercios”.
Desde la entidad destacan algunas medidas destinadas a vigorizar las ventas. “En las ciudades de frontera fue muy importante el acuerdo '12 cuotas todos los días, todos los rubros' de CAME? ATACYC para levantar el consumo”, indicó el titular de CAME, Fabián Tarrío. Otro impulso vino por el lado de las promociones. Por ejemplo, en calzado y textiles muchos comercios presentaron ofertas de 2x1 o descuentos que llegaron al 40% o 50%, lo que permitió “rotar la mercadería y obtener liquidez”, afirma CAME.
