Si el 22 de octubre se repiten los resultados del último domingo, Cambiemos habría cumplido el objetivo propuesto para las legislativas. Superar las cien bancas en Diputados y alcanzar el tercio en el Senado. Aclarando que, hasta 2019, el gobierno de Mauricio Macri contará con minorías en ambas cámaras. Con la diferencia de que, en la Cámara Baja se consolida como el bloque más numeroso. En el Senado, acorta la diferencia con el peronismo, pero aún queda lejos de superarlo.
Si se toma como referencia los resultados del escrutinio provisorio de las PASO, el interbloque Cambiemos en Diputados pasaría de las 83 bancas a 104. Quedaría a veinticinco escaños del quórum. Será menos el esfuerzo para lograr acuerdos, pero aún tendrá que trabajar por iniciativas consensuadas, si el oficialismo pretende reactivar la actividad parlamentaria en 2018. El bloque kirchnerista perdería un escaño y quedaría en 70. El más deficitario sería el Frente Renovador, que perdería once legisladores y caería a 26. Mientras que otros de los ganadores sería el Bloque Justicialista, si se da la lógica de que los legisladores de los gobernadores peronistas queden en esa bancada: pasaría de 17 a 37.
En el Senado, el principal perjudicado sería el PJ-FpV. Perdería cinco bancas y pasaría de 39 a 34. El oficialismo alcanzaría los 24 escaños. Es decir, un tercio del total, según se desprende de un informe de la fundación Directorio Legislativo.
Quedarán resolver, de todas formas, varias incógnitas. Por caso, si los cordobeses que responden a José Manuel de la Sota seguirán integrando el interbloque de Massa en Diputados, si el Frente para la Victoria se conservará como tal y lo mismo con el Bloque Justicialista.
Similar escenario en el Senado, a partir de diciembre y con el posible ingreso de Cristina Kirchner, se discutirá si la exmandataria compartirá formalmente bloque con Miguel Angel Pichetto o si el PJ-FpV se parte en dos.
