Por Carlos Boyadjian
La coyuntura en la industria de bienes de capital, sin dudas, es diversa y compleja. Al respecto, Jorge Göttert, el titular de la cámara que reúne a los fabricantes de máquina herramienta y tecnologías para la producción (Carmahe), señaló en un comunicado de la entidad que “hay varias áreas que ya ven la reactivación, por ejemplo las vinculadas a la maquinaria agrícola y agronegocios, también algunas partes de la industria automotriz, como otros fabricantes de bienes de alto valor agregado, pero todavía hay muchos sectores que están muy complicados”.
En este sentido, Göttert rescató las medidas concretas del Gobierno que hacen pensar que las mejoras que ya existen tienden a generalizarse, pero el proceso es muy lento. “Todavía hay medidas de fondo, sobre todo aquellas que hacen a los costos de producción en el país, los internos, que tienen que solucionarse” precisó el empresario.
Aclaró que el Ejecutivo se comprometió a trabajar sobre este punto, lo que genera cierta tranquilidad, pero indicó que “nuestros empresarios reclaman más celeridad, los tiempos se agotaron y es importante que esto suceda rápidamente para que algunas empresas no se queden en el camino”.
La prórroga
El pasado 31 de julio se pubicó en el Boletín Oficial el Decreto 593/2017 que prorroga hasta el 31 de diciembre el régimen de promoción de incentivos para los fabricantes de bienes de capital, a partir de un bono fiscal (hasta el 14%) que podrá ser aplicado al pago de impuestos nacionales.
Al respecto, la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra) destacaron que el mecanismo “permite promover las inversiones y la innovación tecnológica en una industria que resulta clave para impulsar el desarrollo productivo argentino, con alta presencia de recursos humanos calificados y capacidades de innovación”. Sin embargo, la entidad “lamentó” la exclusión de las estructuras metálicas de los beneficios de este régimen y su impacto en la competencia frente a los productos importados.
