El tema de la competitividad en Vaca Muerta preocupa sobremanera a los grandes operadoras y a las empresas de servicios del sector. Si bien el acuerdo firmado entre el Gobierno, la provincia de Neuquén, las empresas y, sobre todo, los sindicatos petroleros ha reactivado algunos proyectos importantes, la actividad todavía no arrancó con mayor fuerza.
Días atrás, los directivos de las principales petroleras que operan en Vaca Muerta volvieron a plantear la necesidad de contar con mejor infraestructura y ganar en competitividad en el desarrollo de los recursos no convencionales tras la firma de los acuerdos de inversión por U$S 1.150 millones con la provincia de Neuquén, por parte de YPF, Total Austral, Pan American Energy y Wintershall para el desarrollo de un programa piloto en las áreas Aguada Pichana Este y Oeste y Aguada de Castro.
Reclamos y avances
Para las compañías, el desarrollo de las áreas hidrocarburíferas en Vaca Muerta plantea una necesidad de infraestructura ligada a los costos logísticos que vinculen a los yacimientos, mediante autopistas, rutas, vías férreas, gasoductos y oleoductos troncales, tendidos eléctricos, ente otros requerimientos.
El director general de Wintershall Energía, Gustavo Albrecht, consideró que en Vaca Muerta “hay que seguir trabajando en aumentar la eficiencia para el desarrollo de los recursos”, en un desafío de “competitividad que resulta clave porque ayuda a bajar los costos de gas y petróleo en shale en un contexto de precios tan bajo del crudo en el mundo”.
En ese mismo sentido, Albrecht consideró como un tema importante en la ecuación económica “el desarrollo de infraestructura en trabajo con la provincia y el Estado, para abaratar los costos de la logística que tiene un rol crítico en el manejo de este tema tan difícil y costoso de desarrollar”.
Por su parte, el director general de Total Austral, Jean Marck Hosanski, resaltó el efecto que tuvieron en el anuncio de inversión “el acuerdo de productividad firmado con los sindicatos petroleros de la provincia y el programa de estímulo a la producción de gas no convencional del Ministerio de Energía”.
En esa misma línea, el presidente de YPF, Miguel Gutiérrez, aseguró que los contenidos de la adenda firmada en enero con los sindicatos petroleros “está en completa ejecución” tras una progresiva implementación en las empresas contratistas y auguró que estos entendimientos sectoriales permitirán “seguir haciendo anuncios de inversión de este tipo”.
“Los sindicatos estuvieron dispuestos a analizar la competitividad de Vaca Muerta y a hacer un cambio estructural, lo que permite poner en valor el área y que las inversiones necesarias pudieran llegar. Ese acuerdo que tuvo su culminación en enero marcó un camino y lo abrieron a las nuevas inversiones”, enfatizó Gutiérrez tras la firma de documentos.
Finalmente, el director ejecutivo de Pan American Energy, Marcos Bulgheroni, consideró que “la eficiencia es una búsqueda continua de todos para el desarrollo de la cuenca, también la vocación inversora y de tomar riesgos como hizo PAE que en 5 años lleva invertidos alrededor de U$S 1.200 millones”.
“Invertimos mucho en la provincia para enfocarnos en el desarrollo del no convencional, lo que nos permitió incrementar la producción de gas 7 veces, bajar el costo de los pozos hasta 50% y poner en producción cientos de pozos con tecnología de punta”, enfatizó Bulgheroni, al explicar que “aunque falta mejorar los costos de la logística e infraestructura el desarrollo de Vaca Muerta es una cuestión de tiempo en un camino de no retorno”.
Más voces
Consultado por El Economista, el especialista en energía Daniel Gerold, de la consultora G&G, dijo que “los anuncios de las últimas inversiones en Vaca Muerta son positivos”. Aunque reconoció también “que los impuestos se tornan inviables frente a otros países, salvo para el gas para el que hay subsidios”. Para Gerold, en materia impositiva el país sigue lejos de Estados Unidos. Con respecto al convenio colectivo de los trabajadores del petróleo de Neuquén se modificó el esquema de turnos para que los trabajadores se desempeñen en los yacimientos.
El potencial
Por su parte, para el ex secretario de Energía, Emilio Apud, “es auspicioso que en las actuales condiciones de incertidumbre que genera la situación política y económica en un año electoral, se estén concretando proyectos de inversión en Vaca Muerta”. Agrega: “Hay muchos interesados de peso internacional que se están convenciendo de las excelentes características del yacimiento”. Y para Apud, “en la medida en que el Gobierno logre un resultado razonable en las próximas elecciones y se vayan concretando las obras de infraestructura ya comprometidas y se hagan los ajustes necesarios en impuestos, regalías y tasas, el crecimiento de la actividad en Vaca Muerta puede ser de tal magnitud que permita en un plazo de 8 a 10 años transformarnos en un país exportados de gas”.
Con respecto al capítulo tributario, explicó que “falta avanzar en el tema de los impuestos como ocurre en toda la economía, aunque depende de los avances que se logren en las cuentas fiscales de las provincias petroleras y de la Nación”.
Para Apud, los acuerdos con los sindicatos constituyen un gran paso, impensado en nuestro país con las rigideces laborales anacrónicas que viene padeciendo por décadas. Se ha logrado incluir un concepto elemental en cualquier actividad económica: la productividad laboral. Con estas intenciones y con la liberación del mercado del petróleo y gas, como lo establece la ley ignorada desde 2002, los costos necesariamente seguirán bajando.
Y frente al déficit de infraestructura que plantean las empresas, Apud reconoce que “el impacto es alto y su solución no inmediata”, y eso quita competitividad internacional. En su opinión, al menos para Vaca Muerta, se está trabajando en los ámbitos nacional, provincial y empresarial, pero será necesario acelerar el proceso.
