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Rojo comercial es US$ 2.613 M y ya es el más alto desde 1994

Con la combinación de exportaciones casi chatas (suben apenas 0,8% en el 2017) y exportaciones volando 13% interanual, el rojo comercial se disparó en el 1º semestre

Alejandro Radonjic 26 julio de 2017

 Por Alejandro Radonjic

Así como el dato que entregó el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) del Indec fue muy positivo, todo lo contrario puede decirse del Intercambio Comercial Argentino (ICA), el otro informe clave que difundió el Indec ayer por la tarde. En junio, las exportaciones cayeron 2,6% (la segunda caída del 2017, luego del 6,3% de febrero) y, además, el saldo comercial trepó a nada menos que US$ 748 millones, llevando el rojo acumulado en el año a US$ 2.613 millones (el más alto desde 1994). En el periodo enero-junio de 2016, vale recordar, la balanza era positiva en US$ 689 millones. Así, las exportaciones están lejos de ser un motor del crecimiento (“las exportaciones siguen estancadas ante la demora del agro”, dicen desde ABCEB), como declama el Gobierno, y el saldo comercial, que se perfile para un rojo no menor de US$ 4.500 millones, parece a afirmarse como un problema con el que deberá lidiar Cambiemos más temprano que tarde. Quizás, ajustando la paridad peso-dólar, hoy en la zona de $18/US$.

Completan el panorama unas importaciones creciendo 14,5% (y 13% en el acumulado anual), aunque ahí hay margen para una lectura más ambigua y el dato seguramente fue celebrado por quienes ven allí un indicio de una aceleración de la actividad (y la inversión) y una apertura de la economía hacia el mundo. Y criticada por quienes, en el contexto de un consumo menguante y una economía anémica, se preocupan porque los importados crezcan a tasas más que chinas.

En resumen, la falta de competitividad sigue siendo un tema (“el” tema, para muchos), aún falta una estrategia exportadora más sólida (y efectiva) y una red de proveedores locales que evite los saltos vistos en las importaciones cada vez que la economía insinúa con volver a crecer, y nos sumerja en un rojo comercial no menor que complique la salud de las cuentas externas.

“La caída de 2,6% de las exportaciones de junio respecto de igual período del año anterior se debió a disminuciones de 0,7% y 1,9% en precios y cantidades, respectivamente”, indicó el ICA. El valor de las exportaciones de productos primarios se redujo 3,6% de manera interanual: los precios crecieron 4,7% y las cantidades se redujeron 8%. Las exportaciones de MOA cayeron 8,8%: los precios cayeron 5,4% y las cantidades, 3,5%. Las exportaciones de MOI crecieron 12,4%, con una caída de precios de 1,2% y un aumento de cantidades de 13,8%. Ese 13,8% sea, quizás, el dato más positivo del informe. Las exportaciones de combustibles y energía se contrajeron en 44,1%: los precios subieron 15,6% y las cantidades cayeron 51,7%.

El acumulado

En los primeros seis meses de 2017, las exportaciones totales crecieron 0,8% respecto de igual período del año anterior. Las exportaciones de MOI crecieron 10,8% y las de combustibles y energía 8,6% mientras que las exportaciones de productos primarios y MOA cayeron 5% y 2,5%, respectivamente.

Importaciones para todos

El valor de las importaciones de junio de 2017 fue 15,4% superior al registrado en igual período del año anterior. En valores absolutos, aumentaron en US$ 786 millones. Los precios aumentaron 5,8% y las cantidades, 9%. Durante el mes de junio, crecieron 32,3% las importaciones de piezas y accesorios para bienes de capital; 25,6% las de vehículos automotores de pasajeros; 18,1% las de bienes intermedios; 13,2% las de bienes de consumo y 10,0% las importaciones de bienes de capital. Las únicas importaciones que cayeron fueron las de combustibles y lubricantes, que se redujeron 5%.

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