Tras las críticas recibidas por el proyecto de construcción de una central nuclear en la provincia, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, ratificó “lo limpia que es la energía nuclear”, aunque no descartó la posibilidad de convocar eventualmente a una consulta popular como una “última alternativa” y únicamente en la “zona de impacto” de la central.
“Veo a todo el mundo apurado como si fuese un tema de acá a dos meses”, se quejó Weretilneck en diálogo con la prensa local y defendió nuevamente las “ventajas” que tiene la actividad. “Nadie duda de lo no contaminante, de lo limpia que es la energía nuclear”, señaló.
Desde que fue anunciado por el presidente Mauricio Macri en su visita oficial a China, que aportará el financiamiento para la construcción de la nueva central, el proyecto de edificar una quinta generadora nuclear en el país emplazándola en la costa atlánica rionegrina provocó el rechazo de diferentes sectores políticos, sociales, comunitarios y medioambientales. Por caso, coincidieron este martes el rechazo de la gobernación de Chubut en la última reunión del Consejo Federal de Medio Ambiente y una movilización en oposición a la iniciativa en Viedma, donde podría estar ubicada la central.
En ese sentido, el gobernador señaló que si bien había dicho que sería en “la costa atlántica”, los estudios preliminares “no indican que sea en el Golfo San Matías”, por lo que podría terminar siendo precisamente en Viedma, donde se concentra el rechazo. La ubicación definitiva, especificó, se conocerá recién en ocho meses.
