El Banco Central dispuso que a partir del 1° de junio todas las cuentas bancarias llevarán un alias. Para ello, se asignará una denominación por defecto a aquellas que todavía no lo posean y a las cuentas nuevas, que el usuario podrá cambiar a través de los canales electrónicos.
El formato del alias por defecto será una combinación al azar de tres palabras breves y de uso frecuente del idioma castellano, cuya ortografía no sea ambigua cuando se transmite de manera oral. Los usuarios bancarios podrán consultar por los medios habituales el alias asignado.
La asignación por defecto permitirá al pagador de una transferencia solicitar directamente el alias a cualquier destinatario. Asimismo, hará más sencilla la vinculación de la cuenta bancaria a servicios de pago que hagan uso del débito inmediato en cuenta (DEBIN) que se pondrá en marcha este año.
A la fecha, más de 150.000 clientes bancarios ya identificaron sus cuentas con alias. El sistema sirve a los usuarios para identificar de manera más sencilla su cuenta, mediante cualquier combinación de hasta 20 caracteres. Los bancos y las aplicaciones de pagos para celulares permiten realizar transferencias inmediatas identificando al receptor por su alias, de una manera más simple que con el CBU.
El alias es portable, es decir, un cliente bancario puede desvincular el suyo de una de sus cuentas y vincularlo con otra. Ningún otro usuario puede acceder a un alias que ya haya sido utilizado. El sistema es administrado centralizadamente para evitar duplicaciones y garantizar la seguridad de las operaciones por la cámara de compensación electrónica COELSA.
