El Economista - 70 años
Versión digital

jue 28 Mar

BUE 25°C

El consumo dio malas noticias en febrero: -4,1%

06 marzo de 2017

por Mariano Cúparo Ortíz

El consumo minorista medido por CAME dio -4,1% en febrero. Este indicador venía dando señales de rebote pero en febrero las noticias volvieron a empeorar y modificó la tendencia. Con todo, el primer bimestre del año terminó en un promedio de -3,3% respecto al 2016.

Inquietud a futuro

El comunicado de CAME que presentó los resultados del relevamiento que realiza mes a mes fue bastante duro respecto a la coyuntura: “Todos los rubros vieron caer sus ventas, en un mercado que, además de los problemas de poder adquisitivo que vienen arrastrando las familias, mantiene expectativas inciertas hacia adelante. Esto ocasiona alguna inquietud por la información de los despidos que se dan en determinados sectores de la economía”.

Además advierte sobre cierto impacto negativo que tuvo, al menos al principio, el programa Precios Transparentes: “En el segundo mes del año el consumo minorista se mantuvo sin repuntar y en cierta forma se vio algo afectado por la complejidad inicial que generó el programa Precios Transparentes, en un contexto donde no se vieron tampoco rebajas de precios significativas, que por algunos días llevó a reducir las compras en cuotas”. Con todo, advirtió CAME, el consumo en febrero fue menor al de enero.

Otro factor de relevancia que remarcó CAME fue la cuestión de la competencia externa, donde la discusión acerca del atraso cambiario tendrá mucho que decir.

“Siguió restando consumo la competencia que ofrecen países vecinos como Chile, Paraguay, Uruguay y Brasil, donde los valores son más convenientes y muchas familias cruzan constantemente a realizar sus compras. Si bien ese efecto se siente en todo el país, es mucho más notorio en las provincias cercanas a Chile, Bolivia y Paraguay”, sostuvo el comunicado publicado ayer.

¿Repunta?

Otra discusión, tal vez de mayor relevancia, se dispara a partir de los nuevos datos. ¿Hay brotes verdes? Algunas consultoras de la city parecen darlos por hecho de la mano del repunte que venía prometiendo el consumo minorista con sus caídas cada vez menores, con la recaudación del IVA impositivo, del impuesto al cheque y de la seguridad social mostrando mejoras sensibles, con incrementos en la producción automotriz, con la obra pública arrancando y alguna señal positiva de los despachos de cemento.

Pero algunos analistas pusieron algunos reparos en las últimas semanas. La recaudación del IVA impositivo podría ser impulsada por el tarifazo, que mejora la recaudación a través de un consumo de evasión cero, como son los servicios públicos. Y algunas mejoras en recaudaciones sectoriales podrían estar siendo sobreestimadas al comparar con un diciembre de 2015 que estuvo casi parado por la incertidumbre de la transición.

Para algunos analistas, ya los datos de enero estaban mostrando cierta moderación en las perspectivas de recuperación, tanto en el ejemplo de la producción automotriz, como en el de los despachos de cemento, donde el primer mes del año fue más discreto que el cierre del 2016.

El comunicado de CAME mostró que en febrero la peor caída fue la del sector joyerías y relojerías, que llegó a -7,1%, seguida por calzados de -6,6%, por jugueterías de -6% y por electrodomésticos y artículos electrónicos de -5,2%. Indumentaria dio -3,7%, perfumería -2,2% y alimentos y bebidas -1,8%.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés