El programa “Precios transparentes”, impulsado por el Gobierno, comenzó a regir ayer obligando a los comercios a publicitar el precio en un pago (con tarjetas de débito, crédito o en efectivo) y diferenciarlo del que rige para la financiación. Según explicó el secretario de Comercio, Miguel Braun, la iniciativa apunta a “transparentar” el costo de las cuotas para que éste deje de ser “subsidiado” por quienes abonan al contado.
En el mejor de los escenarios posibles la modificación redundará, a medida que se vaya generalizando, en una baja del precio de los productos contado y suba del precio del pago en cuotas, ya sin beneficio para el usuario. “Ese caso presenta una situación neutral en lo referido a los precios pagados, redistribuidos más hacia quien corresponde pero con una probable caída del consumo general”, evaluó el economista Ariel Setton.
De todos modos, y si bien todavía es difícil hacer cálculos generales, la rebaja de los precios al contado estuvo muy lejos de la augurada por el Gobierno, que oscilaba entre el 15% y el 20%. En cambio, se advirtieron aumentos contundentes en los precios financiados.
Los ejemplos
A modo de ejemplo, y según un relevamiento de Noticias Argentinas, Frávega mantuvo el precio de la notebook Positivo-BGH modelo Z-131 en $7.999, el mismo valor que el 8 de noviembre, pero en 18 cuotas el precio final alcanza los $9.919,08, un alza del 24%. En la cadena Compumundo, un iPad Mini 4 16 Gb que en noviembre costaba $9.999 al contado y en 12 cuotas, ahora tiene un valor de $10.799 en un pago y alcanza los $19.114 en 24 cuotas, lo que significa en ajuste del 76,99%. En Garbarino un aire acondicionado Coventry de 2.500 watts tiene un precio de $6.999 de contado y alcanza a los $ 11.921 en 24 cuotas, por lo que se encarece 70,3%.
La nueva normativa, que prohíbe taxativamente utilizar la consigna de “cuotas sin interés”, impide la posibilidad de que el comercio realmente pueda ofrecer cuotas sin cargo extra absorbiendo todo el costo financiero de la venta como parte de una política comercial, lo que representa una metodología muy usada en épocas de bajas ventas o para evitar otros costos como el Pago Adelantado de Cupones.
Por otro lado, algunos economistas advirtieron en el nuevo programa es una estrategia del Gobierno para afectar la medición de la inflación. “Esto es así dado que los organismos de estadísticas públicos registran los precios de contado en un sólo pago, independientemente del medio de pago que el consumidor utilice”, explicó Mariano Kestelboim.
