Después de que se conociera el rumor de que el presidente de Brasil, Michel Temer, le habría pedido a Mauricio Macri el ingreso del azúcar en el acuerdo del Mercosur, los productores argentinos salieron a criticar la idea con un comunicado en el que expresaron “su más enérgico rechazo”.
“El azúcar es el único producto que quedó excluido del marco normativo del Mercosur debido a la agresiva política de subsidios aplicada por Brasil en su sector sucroalcoholero, lo que le permitió convertirse en el principal productor y exportador del mundo, y también por la importancia socioeconómica de esta actividad para todas las provincias del noroeste argentino (NOA)”, aseguró el Centro Azucarero Argentino (CCA), al tiempo que recordó que “con muy buen criterio, considerando estos elementos, el Congreso Nacional sancionó las leyes 24.822 y 25.715, que establecen el marco normativo para el sector y compensan las asimetrías productivas entre los dos países”.
En ese sentido, la entidad advirtió que las “asimetrías que siguen vigentes” al referirse a un estudio reciente de la Asociación de Azúcar de Estados Unidos acerca de los aportes que el gobierno del país vecino le otorgó durante más de tres décadas a esa industria. “A la fecha, alcanzan la friolera de US$ 2.500 millones anuales”, remarcó.
Lo cierto es que, de concretarse, la medida podría causar serios conflictos en la actividad, que, como la mayoría de las economías regionales, enfrenta altos costos que contribuyen a la baja rentabilidad. De hecho, CCA hizo hincapié también en el plano logístico y laboral, y afirmó que los valores locales “son el doble de los de Brasil”.
