Anthony Scaramucci, un ignoto para casi todos, fue uno de los hombres más buscados en el Foro de Davos, que comenzó formalmente ayer. Resulta que Scaramucci, financista neoyorquino y uno de los fundraisers de la exitosa campaña que llevó a Donald Trump a la Casa Blanca, es uno de sus asesores más cercanos y suena para ocupar la Oficina de Obligaciones Públicas y Asuntos Intergubernamentales.
Con la asunción del republicano cada vez más cerca y muy poco información sobre lo que hará desde el próximo viernes, Scaramucci fue ayer el hombre más en los Alpes suizos. A diferencia de la verba incendiaria de su jefe, llevó tranquilidad a los presentes y sugirió que Trump jugará fuerte, pero es consciente de sus limitaciones y la necesidad de cuidar el equilibrio general.
Sobre la relación con China, dijo: “Tenemos una causa común”. Agregó: “Debemos tener una relación bilateral fuerte. También creo que EE.UU. y el Nuevo Gobierno no quieren tener una guerra comercial: solo queremos un proceso de comercio libre y justo”.
Según Sacramucci, todos los acuerdos comerciales desde el Marshall Plan fueron perjudiciales para EE.UU.: los demás países pudieron exportar sus bienes y servicios hacia el codiciado mercado estadounidense, pero EE.UU. no pudo hacer lo mismo. “Lo único que pedimos ahora es que los acuerdos sean más simétricos. El efecto de los acuerdos durante los últimos 50 años perjudicó nuestra industria y golpeó a nuestra clase media y trabajadora”.
El 20/1
Sobre el Inauguration Day, el día en que Trump asumirá formalmente, Scaramucci dijo: “Será reganesco”. En referencia, claro está, a Ronald Reagan, uno de los presidentes republicanos más queridos y exitosos de las últimas décadas. “La comunidad global estaba preocupada con Reagan y ocho años después se dieron cuenta que era un hombre de paz y compasión. Nos condujo hacia un mundo más pacífico, y eso mismo pasará con Trump”.
La literalidad
El error que están cometiendo todos con Trump, dijo Scaramucci, es tomarlo tan literalmente. Los votantes, y los que decidieron acompañarlo, lo toman simbólicamente, dijo y comentó que Trump seguirá usando su cuenta de Twitter “para conectar a un nivel más íntimo”. Además, dijo que “es la persona menos racista que jamás conocí, sino pregúntele a Martin Luther King III”.
“Es un gran líder. Puede juntar gente y respeta a los otros líderes”, amplió Scaramucci y aventuró que tendrá una “relación fenomenal” con Barack Obama.
La era Trump
“Yo lo veo de una manera muy diferente a la que lo ven ustedes. Durante los próximos cuatro años ustedes lo verán más como lo veo yo hoy”, dijo Scaramucci. “Tengan algo de fe y confianza en que hay gente inteligente, que no se siente más inteligente que todos los demás, que están analizando cómo mejorar las cosas”, anunció. ¿Los habrá convencido a los asistentes?
Curiosamente, Scaramucci dijo que Trump puede ser una esperanza para la globalización si logra aumentar los salarios medios en EE.UU. “Eso supondrá más poder de compra”, acotó.
