Por Luis Varela
Tras la tensión y los fuertes movimientos de precios que hubo en los mercados de todas partes durante noviembre y diciembre por la sorpresa que significó el triunfo de Donald Trump en la elección presidencial de Estados Unidos, los mercados desandan caminos y se preparan para el ingreso a la Casa Blanca del multimillonario gritón.
Dentro de una semana Trump será POTUS: tendrá el joystick de poder más importante del planeta. En ese momento deberá demostrar si tiene condiciones para domar al potro o si, en realidad, tomará decisiones que pueden terminar provocando situaciones desagradables totalmente inesperadas.
Con ese marco, el viernes que viene es la próxima barrera a saltar y, ante el inminente adiós de Barack Obama, hubo un marcado retroceso del dólar contra todas las monedas. El billete verde retrocedió contra el euro y el yen a su peor posición desde principios de diciembre, cayó en Brasil a su peor nivel desde fines de octubre (a pesar de la baja de tasas determinada por el Banco do Brasil) e incluso se tranquilizó en México, donde subió sin parar desde 18,30 a 21,99 pesos desde que Trump fue elegido, y ayer achicó hasta 21,77.
En Buenos Aires la tranquilidad cambiaria es notable. El dólar terminó sin cambios, casi estático durante las últimas semanas, con el dólar oficial ubicado en $ 16,15, el blue en $ 16,82 y la brecha cambiaria consolidada en el 4%.
La debilidad del dólar benefició el precio de las commodities. El petróleo subió un dólar, hasta US$ 53 por barril. El oro siguió firme, los metales básicos mixtos (el níquel bajó fuerte, pero hubo subas del 0,8 al 2,3% para aluminio, cinc, plomo y cobre) y la mejor noticia para Argentina fue una fuerte suba del 1,7% para el trigo y del 2,8% para la soja en la Bolsa de Chicago (el Departamento de Agricultura de EE.UU. dio los nuevos números de cosechas, con el clima seco acelerando la recolección en Brasil).
Con esa estructura en el mercado de monedas, las operaciones con dinero muestran que los pequeños inversores están decidiendo mantener parte del dinero cobrado en los aguinaldos en tasas de interés. A pesar de tener renta negativa contra la inflación (se pagan tasas del 16% al 18%, contra un IPC estimado por los privados en torno al 21%), el stock total de plazos fijos tuvo crecimiento en la última quincena de diciembre, algo que no sucedía desde principios de octubre.
Con Trump a la vista, el Gobierno se sigue apurando para realizar el programa de colocación de deuda de este año. Ayer quedó oficializada la autorización para que el ministro de Finanzas, Luis Caputo, pueda emitir nada menos que US$ 20.000 millones. Caputo es seguido de cerca por todos los analistas y llamó la atención la calificación emitida por Miguel Kiguel, quien afirmó “Caputo hace una excelente labor, tengo confianza infinita en el ministro de Finanzas”.
Pero es tanta la emisión de deuda que el Mercado Abierto Electrónico confirmó ayer que el índice de bonos de la Argentina está retrocediendo de nuevo, por lo que los precios de los títulos públicos argentinos se ubican nuevamente en los niveles anotados en julio del año pasado.
Ayer, con buen volumen, el 73% de lo operado en bonos se transó en seis papeles: AM20 20%, AA17 18%, AY24 18%, PARA 6%, AA21 6% y DICP 5%. Con esa estructura, hubo subas del 1% al 2,3% para los bonos TVPP, BDC19, AA46D, AA46, TVPY, AA26, CO26 y PARYD, y bajas del 1% al 1,5% para los bonos BDED y AN18.
Las Bolsas del mundo también van asimilando la realidad, y después de subas muy eufóricas, están empezando a descender de la gran fiesta que provocó la llegada del magnate al máximo poder. Ayer Wall Street volvió a ceder 0,3%, Frankfurt y Tokio bajaron 1%, mientras que las Bolsas latinoamericanas estuvieron otra vez en alza.
La mayor suba fue para San Pablo, que ganó 2,4%, y la Bolsa de Buenos Aires, con menos volumen ($ 443 millones) logró subir otro escaloncito del 0,66%. En el recinto bursátil todo fue para YPF (operó el 38% del total negociado, por efecto Vaca Muerta), pero también hubo una buena participación de Galicia (12%), ya que se conoció que vendió Efectivo Sí a Galeno.
En cuanto a precios, hubo un salto del 11% para Petrolera del Conosur; subas del 1% al 4,6% para San Miguel, Introductora, Carboclor, Grimoldi, Petrobras Brasil, Colorín, Juramento y Siderar. Y bajas del 1,5% al 4,1% para Celulosa, Andes, Patagonia, Rosenbusch, Domec, Transener, Edenor, Indupa, Comercial del Plata y Francés. En Nueva York los ADR argentinos estuvieron mixtos, con subas del 3% al 6,3% para Globant y Ternium; y bajas del 1% al 2,6% para Edenor, TGS, Cresud, Bunge, Frances y Pampa E.
