El Economista - 70 años
Versión digital

vie 19 Abr

BUE 17°C

Arrancó el road show para la primera emisión internacional del año

17 enero de 2017

El ministro de Finanzas, Luis Caputo, y su equipo de colaboradores iniciaron ayer un road show por distintas ciudades de Estados Unidos y Europa para atraer a inversores a la primera emisión de deuda internacional por alrededor de US$ 5.000 millones que se hará el jueves. Esta operación será la primera del programa financiero oficial para 2017, que buscará obtener este año unos US$ 20.000 millones de nuevo financiamiento y refinanciar casi US$ 21.000 millones.

Como parte del road show, Caputo y su jefe de Gabinete de Finanzas, Pablo Quirno, estuvieron en Londres, hoy irán a Boston y el miércoles estarán en Nueva York. La otra mitad del equipo (Santiago Bausili, el secretario de Financiamiento, y Patricio Merlani, el subsecretario del área) llegarán hoy a Los Angeles y el miércoles se encontrarán con el ministro de Finanzas en Nueva York.

En el mercado coinciden con que el timming elegido para la emisión internacional es muy bueno. Según dicen, al hacer la operación antes de la asunción de Donald Trump como presidente de EE.UU., la tasa que Argentina conseguirá no debería superar el 7%. E incluso muchos creen posible que se pueda pagar alrededor del 5,5% para un bono a cinco años y de 6,5% para uno de siete.

Buen contexto

Una causa por la que los analistas consideran el actual como un buen momento para emitir internacionalmente es que la tasa del bono del Tesoro estadounidense a diez años viene cayendo. El rendimiento de este título pasó primero del 1,77% en los días previos a la elección en Estados Unidos a un 2,59% a mediados de diciembre, pero en las últimas semanas vino cayendo y se situó en alrededor del 2,40%.

Gracias a esto, los títulos argentinos también recuperaron bastante del terreno que habían perdido por el “efecto Trump”, con una compresión de rendimiento de alrededor de un punto en el tramo más largo de la curva en dólares. Así, por ejemplo, el Bonar 2026 cerró hace poco con un rendimiento en torno al 6,65%, contra el 7,60% que tenía a comienzos de diciembre.

Los analistas consideraron muy importante que la emisión se haga antes de la asunción de Trump, ya que después el nuevo presidente podría hacer anuncios o declaraciones que vuelvan a generar turbulencias financieras. Su último discurso no cayó bien entre los operadores porque no dio ningún indicio sobre su futura política económica, entre otras cosas respecto a la expansión fiscal.

Según un analista, además de lo que pueda generar Trump luego de asumir, el mercado teme que haya malas noticias con el crecimiento de China que puedan afectar a los emergentes. Y antes de la asunción de Trump podría haber alguna turbulencia si la premier británica, Theresa May, anuncia hoy un Brexit más “duro” y rápido, aunque Sabrina Corujo, analista de Portfolio Personal, dijo que esta semana “el mundo estará mirando más a EE.UU. que a Gran Bretaña”.

Por otra parte, para los analistas algo que podría favorecer la emisión es que los mercados ven con buenos ojos “la designación de (Nicolás) Dujovne” como ministro de Hacienda “para ordenar la cuestión fiscal”, aunque hay algunas dudas sobre “cómo y en qué plazos lo hará”. Y también fue bien valorado que Caputo expusiera cuáles serán las necesidades financieras que tendrá Argentina este año.

Préstamos bancarios

Por otro lado, los analistas dijeron que fue muy bien vista la operación de “repo” (préstamos de bancos al Gobierno con títulos como garantía, en este caso el Bonar 2024) hecha la semana pasada. Hace unos días, los seis bancos colocadores de la próxima emisión (Santander, BBVA Francés, Citibank, Deutsche Bank, HSBC y JP Morgan) le prestaron al Gobierno US$ 6.000 millones a 18 meses, a una tasa equivalente a la interbancaria londinense Libor más 290 puntos básicos, es decir un 3,8%.

Según los analistas, esto le permitirá al Gobierno descomprimir las tasas de la emisión al reducirse el monto a emitir. “Argentina ya emitió mucha deuda el año pasado y en 2017 también deberá hacerlo, por lo cual hay una cierta saturación de los inversores internacionales sobre la cantidad de deuda que pueden absorber. Eso podía generar que pidieran más tasa si el monto emitir era más grande, algo que ahora se evita con el financiamiento de los bancos”, aseguró Ezequiel Zambaglione, analista de Puente Hermanos.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés