El consumo privado volvió a dar malas señales en noviembre, con una caída de las ventas minoristas de 8,5% en la comparación con el mismo mes del 2015, según el informe que realiza todos los meses la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) a partir de un relevamiento en comercios de todo el país.
El comunicado, difundido ayer, señaló: “El consumo continúa en el letargo de todo 2016”. La merma acumulada para lo que va del año es de 7,1%. Tal vez la peor noticia sea que con este número se puede ver que en noviembre la caída se aceleró respecto a los meses previos, dinámica que ya venía ocurriendo: octubre fue más veloz en su retracción que septiembre y septiembre que agosto.
Salario y deuda
“Noviembre fue otro mes malo para el comercio. Ni los descuentos, ni las posibilidades de financiamiento en cuotas sin interés, ni las ofertas atractivas del mercado, lograron despertar el consumo de las familias que siguió planchado y muy medido. La falta de poder adquisitivo fue notoria”, amplió CAME en su comunicado.
Otro gran componente de la explicación acerca de la caída del consumo registrada en noviembre, además de la falta de poder adquisitivo que caracterizó a las contracciones de los meses previos, fue “el alto nivel de endeudamiento en las tarjetas que frenaron muchas ventas ya sea porque los límites no alcanzaron o simplemente por la necesidad de reducir los pasivos”.
¿Y diciembre?
Estamos en un mes clave para los comercios y si bien reina la incertidumbre acerca de qué ocurrirá, la potencial continuidad en cierta mejora del salario real de la mano de la desaceleración inflacionaria (que aún no dio señales totalmente claras pero viene ocurriendo), los bonos, el medio aguinaldo y el lanzamiento del Ahora 18 brindan esperanzas de mejora en el sector.
Caen todos Absolutamente todos los rubros relevados por CAME registraron caídas en noviembre. La peor de ellas fue la de los electrodomésticos y artículos electrónicos, que llegó a 15,2%. Le siguió la de las ferreterías, que fue de 14,1%; luego la de los materiales para la construcción, de 11,9%; luego la de textil e indumentaria, de 11,9%; seguida por la de bazar y regalos, de 11,4%; la de materiales eléctricos, de 10,8% y la de textil?blanco, que fue de 10,7%. Alimentos y bebidas tuvo una baja de 2,9%, lo que llevó al acumulado a una de 2,7%.
De esa forma, electrodomésticos y artículos electrónicos viene redondeando un año negro, con una caída acumulada en once meses de 14%. Indumentaria, otro sector clave, llegó a una acumulada de 8%.
Acerca del derrotero de este rubro, el comunicado de CAME detalla: “Hubo poca gente mirando y comprando en el mercado. Las ofertas no alcanzaron para activar la demanda que se mantuvo muy pasiva. Dos factores que incidieron en ese rubro, fueron la venta ilegal y los precios más convenientes en mercados vecinos como Brasil, Chile y Paraguay, que afectó sobre todo a los negocios de rangos medios. Las compras por Internet de páginas internacionales también se activaron e inciden en la tendencia desfavorable que muestran los comercios de ese rubro”.
