El Economista - 70 años
Versión digital

jue 18 Abr

BUE 22°C

La reforma electoral sería modificada y peligra su aprobación

02 noviembre de 2016

Pasada ya la euforia de la votación en Diputados, el Gobierno afronta un desafío aun más complicado: que la boleta electrónica sea avalada por el Senado. Y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, ayer fue testigo de ello, cuando defendió ante los senadores, el proyecto de reforma electoral. Una promesa de campaña del presidente Mauricio Macri, que entra en un terreno espinoso y difícilmente pueda recibir su sanción definitiva en los próximos días, como añoraba el Ejecutivo.

Los representantes de Cambiemos más optimistas, aseguran que la iniciativa será aprobada con cambios, por lo que deberá regresar a la Cámara Baja para su ratificación. De ser modificada, y regresar a Diputados, “la aprobación deberá ser antes del fin de las sesiones ordinarias, si queremos que se implemente en el 2017”, le dijo a El Economista Federico Pinedo, presidente previsional del Senado. El período finaliza el 30 del corriente, Pinedo aseguró que todavía se está analizando la extensión, pero, de realizarse, el peligro para el oficialismo es que en ese período pueden colarse proyectos de la oposición. Los representantes de Cambiemos más negativos, dan por hecho que la ley está caída, así le dijo un importante hombre del Gobierno en el Senado a este diario, versión que tanto opositores como oficialistas no se animan a dar por confirmada. Vale aclarar que, además de la reforma, el Congreso debate el Presupuesto y discutirá las modificaciones al impuesto a las ganancias.

Frigerio, junto al secretario de Asuntos Políticos, Adrián Pérez, compartieron mesa con Juan Manuel Abal Medina, presidente de la comisión de Presupuesto, Marcelo Fuentes, de Asuntos Constitucionales y Pedro Guastavino, de Justicia, los tres del bloque opositor mayoritario. Las razones que el Senado ofrece para vaticinar un pronóstico complicado para Cambiemos son dos: la conformación de la cámara, 39 bancas del PJFpV, 18 escaños de otros bloques de la oposición, y 15 de Cambiemos; la existencia de un proyecto de la autoría de Abal Medina y Omar Perotti que rechaza el conteo de los votos por vía electrónica y establece una implementación gradual del nuevo sistema.

Críticas

Los principales reproches que recibe el proyecto del Ejecutivo, que aprobó con cambios la Cámara Baja, coinciden en que el conteo debe ser únicamente manual y de esa manera eliminar el chip que contendría la boleta. Advertidos por expertos, críticos añaden que el chip vulnera el secreto del voto. “La combinación de ambos sistemas agrega certeza, confiabilidad, confianza al proceso electoral”, respondió Frigerio. “El conteo manual en todos estos años ha exhibido errores, si contamos también desde la máquina tenemos más firmeza”, completó Pérez. El ministro insistió que todavía es prematuro hablar específicamente del sistema porque todavía no se ha diseñado, y agregó: “Es cierto que tenemos que acelerar los tiempos para llegar tranquilos a la próxima elección, pero también tenemos que respetar los tiempos del Congreso”. Añadió a su vez que la confiabilidad del sistema no la va a determinar el Ejecutivo si no la Justicia Electoral. Y en ese sentido, sostuvo: “Este proyecto no contempla una sola delegación de facultades adicionales al poder ejecutivo nacional, ni una sola, todo lo contrario”.

El proyecto que en su momento el Poder Ejecutivo giró a la Cámara de Diputados, complementaba la implementación gradual del sistema, y un Plan B para excepciones que puedan surgir el día de la votación. Esos puntos fueron eliminados del proyecto a expreso pedido de Sergio Massa, líder del Frente Renovador, a cambio de su respaldo. “Nosotros planteábamos la gradualidad, pero se modificó en Diputados”, se limitó a declarar Pérez. Este punto, como el conteo, serían los dos aspectos que provocarían mayor inconveniente al éxito de la iniciativa de Cambiemos.

Sobre el voto electrónico, y la experiencia de este sistema en el mundo, Frigerio argumentó que “los ejemplos de retroceso que se plantean en Europa no tienen que ver con nuestro sistema”. “Son voto electrónico, acá no estamos hablando de voto electrónico, estamos hablando de la boleta con un dispositivo electrónico”, insistió el funcionario.

A poco más de dos kilómetros de distancia, en la Casa Rosada, José Torello, asesor de Macri, fue más duro y aseveró que “el Poder Legislativo demostrará que no está a la altura de las demandas de la sociedad”, si no se aprueba la boleta con conteo electrónico. El proyecto será debatido mañana, el martes y jueves de la semana próxima, cuando podría haber despacho de comisión, para tratarse en el recinto el miércoles 16 de noviembre.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés