Para un país como la Argentina no es novedad que el sector metalúrgico exhiba un fuerte déficit comercial, pero en todo caso, sí lo es la magnitud del desbalance entre exportaciones e importaciones. La buena noticia es que se registró una disminución del déficit comercial frente al mismo período de 2015.
Un informe de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra), sostiene que durante el tercer trimestre del año “la balanza comercial metalúrgica resultó deficitaria en US$4.506 millones, -21,1% menor a la del mismo período del año anterior. Entre julio y septiembre las exportaciones se incrementaron 3,1% interanual (US$ 702 millones), en tanto que las importaciones bajaron -18,5% contra el mismo período del año anterior, llegando a US$ 5.207 millones.
Con estos números, el acumulado de los primeros nueve meses de 2016, el déficit comercial sectorial trepó a los US$13.807 millones, resultante de una caída de las ventas al exterior de -11,8% y de -9,9% en las importaciones, siempre comparando el período enero-septiembre de este año contra 2015.
Incertidumbre
En este contexto se destaca la gran volatilidad que reina en la industria. Según destaca Adimra, el comportamiento de las exportaciones ?sin considerar los rubros “Tubos y perfiles de acero”, “Aeronaves” y “Buques y embarcaciones”? se debió a una mejora en las cantidades (+1%) pero un retroceso en los precios (-5,1%). Es justamente el escenario inverso al que se ve en las importaciones, donde influyó negativamente el efecto cantidades en un -23,1% pero positivamente en los precios (-1,8%).
Por su parte, durante el tercer trimestre “el saldo comercial de bienes de capital (US$ -1.226 millones) se redujo -24% interanual, producto de un aumento de las ventas al exterior en 0,7% (US$140 millones) y una caída de las importaciones en -22%, que llegaron a US$1.367 millones.
Los principales productos metalúrgicos exportados durante el tercer trimestre fueron autopartes, con unb 30% de participación, tubos y perfiles de acero (13%), bombas y compresores (6%), otras máquinas y equipos (6%) y equipamiento hospitalario (5%). Por su parte, en importaciones el primer lugar también es ocupado por autopartes (22%), seguido por equipos de telecomunicaciones (7%), equipamiento hospitalario (5%), equipos de uso general (5%) y maquinaria vial (3%).
Razones de peso
Cabe destacar que existe una fuerte equivalencia entre importaciones y la caída de los niveles de actividad industrial en general y de la industria metalúrgica en particular. El informe de Adimra recuerda que en el tercer trimestre del año las importaciones metalúrgicas registraron una contracción del 18,5% interanual, en tanto que “este comportamiento similar entre las variables, refleja la existencia de cierta correlación entre producción e importaciones metalúrgicas y de bienes de capital”.
Al respecto, Adimra subraya que la importación de bienes de capital en el tercer trimestre del año “disminuyó -10,5% interanual (US$ 1.613 millones), pero si se considera los rubros aeronaves, buques y embarcaciones “la variación es negativa en un -22% en relación al mismo período de 2015”.
Este desempeño del comercio exterior sectorial está en sintonía con el comportamiento de la industria a nivel de utilización de la capacidad instralada. En este sentido, los últimos datos oficiales para el mes de septiembre indican que la industria metálica básica llega a un 65,3% de uso de su potencial productivo, en tanto que la indusria automotriz registra el 51,4% y la metalmecánica, excluida la industria automotriz, alcanzó el 51,9% de utilización de la capacidad instalada.
