La disminución de la demanda en las principales ramas industriales que utilizan el acero como insumo principal (automotriz, metalmecánica, fabricación de electrodomésticos) llevó otra vez en septiembre a un retroceso de la producción de acero.
Según datos de la Cámara Argentina del Acero la producción de acero crudo retrocedió el mes pasado el 6,2% intermensual, esto es, comparado con el mes anterior (agosto) y 27,9% frente a septiembre de 2015. Por su parte, la producción acumulada de los primeros nueve meses de 2016 fue 18,6% menor a la del mismo período del año anterior.
En volumen la producción de acero de septiembre fue de 322.100 toneladas, en tanto que desde enero a septiembre el acumulado registró 3.078.000 toneladas, de acuerdo a cifras de la cámara sectorial.
Contexto global
Esta caída de la producción de acero crudo se da en un escenario mundial en el que se evidencia la fuerte presencia de China como principal jugador en este mercado, hoy caracterizado por importantes distorsiones. El exceso de capacidad productiva de ese país impacta de manera importante en el comercio de ese bien transable, y también en el empleo. El hecho quedó plasmado durante la última Cumbre del G20 en Hangzhou, China, en cuya declaración final los líderes mundiales incluyeron una mención a la situación que atraviesa el mercado siderúrgico.
Además, de la sobreproducción de China, en algunos casos se aplican subsidios y otro tipo de incentivos, que afectan negativamente el normal desempeño del sector. El propio presidente chino, Xi Jinping, reconoció que en la industria del acero hay sobrecapacidad de producción y que China es el principal responsable de dicho desbalance. Frente a ello, el país asiático se comprometió a bajar la producción de 150 millones de toneladas en cinco años, sin embargo, no quedó claro cuál será la fórmula para lograr esa meta.
Buenas perspectivas
Pese a esta coyuntura el informe de la Cámara Argentina del Acero rescata el cambio de horizonte para los próximos meses. Si bien la actividad industrial acumula una caída del 4,2% en ocho meses se prevé que habrá sectores con una relativa recuperación. En ese sentido, algunos sectores de la industria siderúrgica ya están mostrando alguna mejoría. Por ejemplo, la producción de aceros planos laminados en caliente y en frío ya están en el nivel del mismo mes del año anterior.
En cuanto a la construcción también está reaccionando, impulsada especialmente por la obra pública. El renglón de aceros largos, si bien cayó en septiembre 17% medido en términos interanuales, no obstante, creció 3,6% en la medición desestacionalizada respecto de agosto pasado.
