El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, participó ayer en Quito, Ecuador, de la Tercera Cumbre de Vivienda y Urbanismo de la ONU, Hábitat III, en la que planteó que Argentina “tiene el desafío de transformar a sus ciudades en espacios de oportunidad” y aseguró que el Gobierno inició “una política de Estado para saldar el déficit habitacional y promover la universalización del acceso a servicios básicos”.
“El 93% de la población argentina reside en centros urbanos que han crecido guiados por la centralidad económica y la falta de planificación, promoviendo así la fragmentación socioespacial, entre y dentro de nuestras ciudades. Esa fragmentación se evidencia en el crecimiento de la tenencia informal de la tierra, la falta de servicios básicos y la baja calidad de la vivienda”, describió y atribuyó a ese fenómeno “que se ha profundizado en las últimas décadas” como “la fuente de la pobreza estructural”.
En ese sentido, planteó la necesidad de implementar “un abordaje integral, superando una visión enfocada exclusivamente en la vivienda” y llamó a la cooperación entre los municipios, las provincias y el Gobierno Nacional. “Argentina es un país federal y la planificación del territorio requiere de la coordinación de todos los niveles de gobierno”, sostuvo Frigerio.
Junto a Frigerio, participaron también entre otros, el gobernador jujeño Gerardo Morales; el embajador argentino en Ecuador, Luis Juez; los intendentes de Santa Fe y Junín, José Corral y Pablo Petracca; el secretario de Obras Públicas, Daniel Chain; el secretario de de Vivienda y Hábitat, Domingo Amaya; la subsecretaria de Hábitat y Desarrollo Urbano, Marina Klemensiewicz; y el subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda, Iván Kerr.
Por su parte, Klemensiewicz, destacó que el presidente Mauricio Macri “definió el Plan Nacional de Hábitat como prioridad, una política de Estado para combatir la pobreza” y aseguró que los tres niveles de gobierno deben trabajar juntos para “dar soluciones a los argentinos que viven en zonas precarias”.
En el encuentro con intendentes de todo el país el mes pasado, el Gobierno Nacional cristalizó una nueva tendencia que los jefes municipales celebran: el trabajo en conjunto con la Nación para la aplicación de políticas públicas y el giro de recursos directo entre Casa de Gobierno y los municipios, en línea con el creciente peso que vienen adquiriendo las ciudades en todo el mundo.
