El Economista - 70 años
Versión digital

jue 18 Abr

BUE 19°C

Carrió contra Gils Carbó y contra la reforma

25 octubre de 2016

Era de esperar. La diputada nacional Elisa Carrió, recuperada de una operación, rechazó el proyecto de reforma del Ministerio Público fiscal que Cambiemos llevará mañana al recinto de la Cámara Baja. Renovó críticas que ya había planteado a sus socios de Cambiemos previo al receso de invierno y anticipó que avanzará con el pedido de juicio político a la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó.

El proyecto recibió las firmas de la oposición el martes pasado y se presta a ser tratado mañana en Diputados. Impulsa acortar el plazo del Procurador General a cinco años con posibilidad de renovar por cinco más. Le otorga mayores atribuciones al Poder Legislativo, a través de la comisión Bicameral de Control y Seguimiento del Ministerio Público, que preside la massista Graciela Camaño. Facilita el proceso de juicio político contra el jefe de los fiscales, exigiendo una mayoría simple en la Cámara Baja y manteniendo la mayoría calificada en el Senado. Otra de las novedades de la reforma es el requisito de cinco años de antigüedad para que un fiscal pueda encabezar una procuradoría, punto que sería modificado. Está en la mira, a su vez, el artículo que le da un plazo de 48 horas para que los fiscales regresen a sus juridiscciones originales.

Para la diputada y socia principal de Cambiemos, el cargo del Procurador debe ser por diez años, “para no depender del Gobierno de turno” y provocar la perdida de autonomía de la institución. Carrió sostiene que el proyecto tiene “nombre y apellido”, y que no es el modo de desplazar a Gils Carbó, lo que corresponde, según la referente de la Coalición Cívica, es el juicio político. Entre los argumentos contra Gils Carbó, Carrió sostiene que desde que asumió el cargo, en el 2012, procedió al nombramiento de fiscales afines al kirchnerismo, salteando pasos previos y también por el traslado “arbitrario” de funcionarios judiciales.

La postura de Carrió provoca además, complicaciones en el tratamiento del proyecto y dudas de lo que pasará cuando llegue al Senado. Cambiemos confía en que la aprobación de la reforma en Diputados está asegurada a partir del apoyo del Frente Renovador y del bloque Justicialista. En la redacción del texto, también estaría el aval de Miguel Angel Pichetto, jefe de la bancada del PJ-FpV en la Cámara Alta. Pero la postura de Carrió podría provocar un cimbronazo. En agosto, el rechazo de la diputada de la Coalición Cívica a los pliegos del presidente Mauricio Macri para la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), causó un fuerte disgusto entre los senadores peronistas, que con su voto aprobaron la designación. A partir de ese momento, Pichetto había asegurado endurecer su postura ante los proyectos oficialistas, situación que el Gobierno teme afrontar con la reforma al Ministerio Público.

Desde el PRO, en un primer momento, estimaron que la avanzada de Carrió no generaría complicaciones en la aprobación del proyecto, según pudo averiguar El Economista. Pero luego trascendió una reunión entre Pichetto y el massismo en el que se habría analizado el posible cimbronazo.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés