En un nuevo gesto de apoyo al sector agropecuario, el presidente de la Nación, Mauricio Macri recibió el viernes en la Quinta de Olivos a los directivos de Federación Agraria Argentina (FAA). Durante el encuentro, la entidad perteneciente a la Mesa de Enlace aprovechó para reclamar medidas diferenciadas para los pequeños y medianos productores y pidió un fondo anticíclico para las economías regionales, hoy uno de los sectores más golpeados por los altos costos y la baja competitividad.
Qué se habló
La creciente brecha que existe entre el productor y la góndola fue uno de los focos principales de la reunión. Con la lechería a la cabeza, la problemática vinculada a la distorsión de precios ya provocó el cierre de varios establecimientos en distintos puntos del país. “Le dijimos al presidente que el 74% de la producción de soja la hace sólo el 17% de los productores, que en la ganadería el 53% hacen el 8%, o que en Neuquén y Río Negro en menos de una década hay 7.000 productores menos”, detalló Omar Príncipe, titular de FAA, quien sugirió también “avanzar en una ley de arrendamientos”, además de la construcción de un puerto que promueva el desarrollo de alternativas de comercialización y exportación, un proyecto que lleva adelante Agricultores Federados Argentinos (AFA).
Es que, según la entidad, la rebaja de las retenciones no impactó de lleno en el sector primario. “Los pequeños productores sabemos ser competitivos, pero necesitamos las condiciones para poder desarrollarnos, para eso habría que hacer una reforma financiera e impositiva, porque al momento el IVA, las escalas de Ganancias, la falta de financiamiento por no poder ser sujetos de crédito y las condiciones generales en estas materias nos están asfixiando”, siguió Príncipe.
En cuanto a la ley de semillas, otro de los puntos más trascendentes en la gestión, el dirigente hizo hincapié en el proyecto que la federación presentó en el Congreso, que apunta a “poner freno a las embestidas que padecen productores y cooperativas”.
Asimismo, reiteró el pedido de reglamentación de la ley de agricultura familiar, con el objetivo de llevar a cabo una registración de productores. “No se trata sólo de un tema económico, sino también social y ambiental”, dijo Príncipe, al tiempo que exigió que se flexibilice la extranjerización de la tierra.
“Si bien tenemos muchas demandas, también tenemos muchas propuestas. Creemos en la necesidad de que haya planes y políticas nacionales para que no cambien las reglas de un día para el otro. Queremos aportar y pensar un país en el largo plazo, que no tenga el eje sólo en la productividad, sino también en el desarrollo”, señaló.
Agenda abierta
Los reclamos fueron escuchados también por el ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, quien suele recibir a la entidad, que ya realizó varias protestas en lo que va del año. Sin una respuesta formal, el ministro acordó una agenda abierta y prometió que seguirá los temas planteados.
“Fue un encuentro muy positivo. El Presidente escuchó las necesidades y las propuestas que le presentamos y abrió un espacio para seguir dialogando y trabajando sobre todas las coincidencias”, aseguró el titular de FAA. “Macri expresó que para él y su Gobierno, el campo es un actor muy importante para lograr el desarrollo del país. Y nos dijo que ellos están trabajando para lograr que la macroeconomía sea confiable, para que la inflación deje de golpearnos, también para que haya reglas de juego claras. Nos transmitió que ellos trabajan compartiendo los objetivos que le presentamos”, concluyó.
