El ministro de Gobierno bonaerense, Federico Salvai, estuvo al frente de la reunión. En la sede porteña del Banco Provincia. Con un objetivo preciso: limar asperezas, encontrar canales de mejor entendimiento, entre el gobierno de la provincia y varios dirigentes radicales, luego de los cuestionamientos del Comité provincial del partido ante la forma inconsulta con la que el gobierno de María Eugenia Vidal había incorporado algunos peronistas a Cambiemos.
Según trascendió, las partes acordaron “articular” políticas al menos “dos veces por mes”, en un ambiente distendido, en el que los participantes confirmaron la pertenencia en Cambiemos y “discutir en el seno de la coalición las decisiones que se van tomando”. Además de Salvai, estuvieron presentes por el PRO, el secretario general de Gobierno, Fabián Perechodnik; los intendentes Ramiro Tagliaferro, de Morón; Néstor Grindetti, de Lanús; y Jorge Macri, de Vicente López; además del diputado provincial Manuel Mosca. En tanto, por el radicalismo asisiteron el vicegobernador, Daniel Salvador; Jorge Silvestre, presidente del bloque de diputados Cambiemos en la provincia de Buenos Aires; el senador Carlos Fernández y los intendentes Franco Flexas, de General Viamonte; David Hirtz, de Adolfo Alsina; y Miguel Gargaglione, de San Cayetano.
Los momentos de mayor tensión se dieron cuando el Comité de la UCR bonaerense había cuestionado a sus socios del PRO por incorporar “de manera inconsulta” a dirigentes del peronismo a las filas de Cambiemos, reclamando un “trato respetuoso” para evitar futuras fisuras en la alianza. Sin mencionarlo, los radicales, en particular el diputado nacional Ricardo Alfonsín, se manifestaron críticos a la llegada del exdirigente del Frente Renovador, Joaquín De La Torre, al gabinete de la gobernadora María Eugenia Vidal.
“Estas mesas de encuentro ayudan a tener una visión más plural y cercana de la Provincia”, señaló Salvai,luego del encuentro, en su cuenta de twitter.
