Ayer, el mercado internacional volvió a mostrar retrocesos para la soja, que parece no tener freno en la tendencia bajista que refleja desde hace ya varias jornadas. Es que el excelente estado de los cultivos y las buenas perspectivas climáticas en el medio oeste norteamericano previstas para el inicio de la trilla alientan la posibilidad de una cosecha récord, lo que ejerce presión sobre los valores en Chicago. Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), el 73% de las plantaciones muestran óptimas condiciones sobre el final de la etapa de la formación de vainas frente al 63% relevado un año atrás, algo que permite pensar en un volumen de producción que rondaría las 111.000.000 de toneladas. Además, el organismo resaltó que los exportadores ya despacharon 126.000 toneladas para entregar en el ciclo 2016/17.
De esta manera, la oleaginosa perdió US$ 6,52 por tonelada en la primera posición; US$ 4,96 en noviembre; US$ 4,87 en enero y marzo y US$ 4,68 en mayo de 2017. Así, se ubicó por debajo de la barrera de los US$ 355 y cerró a US$ 354,76 por tonelada, un monto muy lejano al histórico alcanzado en junio, cuando el grano superó los US$ 432 por tonelada y se acercó a los niveles de 2014.
El trigo en mínimos históricos
Esta semana, el trigo también fue protagonista por las fuertes caídas que registró en las siete últimas ruedas, en las que descendió a su valor mínimo en diez años como consecuencia de las proyecciones de sobreoferta en Norteamérica. Sin embargo, la demanda internacional aportó dinamismo al mercado con licitaciones por 144.385 toneladas por parte de Japón, 134.000 toneladas de Túnez y 50.000 toneladas de Jordania. Esto, pese al fortalecimiento del dólar ante la expectativa de una suba de tasas tras un anuncio de la Reserva Federal, permitió que se contrarrestara levemente la importante baja en los futuros.
El cultivo, en este marco, retrocedió US$ 2,66 y cotizó a US$ 133,47 por tonelada.
El maíz abajo
Por su parte, el cereal acompañó el comportamiento de la soja y el trigo y también mostró descensos a causa del avance una cosecha histórica. En su informe semanal, el USDA informó que el 75% de los lotes mantienen perspectivas inmejorables, con marcas que superaron la media a pocos días del inicio de las labores en los campos estadounidenses. En tanto, la gira realizada por el servicio de consultoría agrícola Pro Farmer estimó la productividad norteamericana de 2016 en 106,83 quintales por hectárea, lo que se traduciría en un stock total de 374.105,9280 toneladas.
Frente a este escenario, en el disponible el maíz perdió US$ 3,05 y concluyó la sesión a US$ 119,68 por tonelada.
Preocupación local
Según expresó la Bolsa de Comercio de Rosario, el mercado “continúa sin levantar vuelo, presionado por las pérdidas registradas en Chicago”. La noticia no es menor para el sector agroexportador, que este año tras la rebaja de las retenciones y la eliminación de los ROEs apostó fuertemente a la siembra y aprovechó las más altas cotizaciones para liquidar el grueso de la cosecha, que se complicó con la llegada de las inundaciones en abril.
Más allá de esto, la BCR aseguró que en el recinto se percibió una leve recuperación en los valores por maíz contractual, aunque recalcó que los volúmenes negociados fueron mínimos.
En concreto, por soja la oferta se ubicó en $ 3.950 por tonelada con descarga inmediata, y US$ 252 para la entrega en mayo.
En el caso del maíz, se ofrecieron $ 2.350 por tonelada con entrega contractual, y US$ 157 para diciembre.
En cuanto al trigo, se escucharon valores de $ 2.150 por tonelada en condición contractual, y US$ 150 con entrega en diciembre.
