Nacida como subsidiaria de una empresa belga que otorgaba préstamos rurales en Argentina ochenta años atrás, Cresud es hoy una de las compañías agropecuarias más importantes del país en la producción de bienes básicos entre los que se destacan los granos, caña de azúcar, leche y carne. Con presencia en Brasil a través de BrasilAgro y en el resto de Latinoamérica, sobre todo en Bolivia y Paraguay, la firma manejada por la familia Elsztain ? líder en el negocio inmobiliario a través de IRSA ? informó que su resultado operativo creció $ 411 millones desde julio de 2015 a fines de marzo de este año “debido al efecto positivo de la reducción de los derechos de exportación y a la depreciación del tipo de cambio”, al tiempo que destacó que desarrolló 8.689 hectáreas en la región durante la campaña anterior y que sembró 174.436 hectáreas, de las cuales espera obtener “muy buenos rendimientos”. Por eso, El Economista dialogó con Carlos Blousson, gerente general de la empresa, para conocer su visión acerca del escenario actual del sector, las perspectivas a mediano plazo, la situación de las economías regionales y el impacto de las políticas que aplicó el Gobierno Nacional, las cuales demostraron una fuerte influencia principalmente en la actividad agrícola, un rubro en el que Cresud pisa fuerte, con un portfolio compuesto por 281.808 hectáreas productivas y 472.412 hectáreas en reservas distribuidas en cuatro países.
Luego de la baja de retenciones, la quita de ROEs y la apertura del cepo cambiario, ¿que expectativas tienen desde la empresa? ¿notan cambios a la hora de encarar nuevos proyectos?
Tenemos una muy buena expectativa ya que nos está permitiendo tomar decisiones con una libertad que antes no existía. Poder operar los mercados de futuros, manejar el flujo de venta relacionado con nuestra estrategia financiera, entre otros aspectos. El cambio más importante para encarar nuevos proyectos es que éstos pueden analizarse con las variables históricas y sin las distorsiones anteriores.
¿Cómo evalúan la situación de la lechería y la ganadería en la actualidad? ¿Qué proyectos tiene Cresud en esos segmentos?
La lechería está sufriendo la baja de los precios internacionales más el incremento de los costos internos debido a la eliminación de las retenciones de uno de los componentes más importante en la dieta como es el maíz . La ganadería no padece el mismo problema ? pese a que el maíz afecta el costo del kilogramo producido ? porque los precios internos han acompañado el aumento de la inflación, aunque vemos que la exportación está sufriendo. El proyecto lechero que tenemos en La Pampa de dos mil vacas en ordeño seguirá trabajando en mejorar la eficiencia, a la espera de una mejora en la relación insumo/producto. La ganadería es una actividad importante en la que elaboramos la cadena completa, desde la cría hasta la faena en nuestro Frigorífico La Pampa. Seguimos mejorando la eficiencia en el uso del pasto para diluir nuestros costos, manteniendo los nuestros buenos índices productivos.
Los productores y el sector privado manifestaron su optimismo de cara a la campaña 2016/17, que trae excelentes perspectivas para el trigo y el maíz, ¿qué proyecciones manejan desde Cresud?
En relación al nuevo ciclo, la idea es aumentar la superficie de los dos cultivos, ya que mejoraron los márgenes y son muy importantes para la sustentabilidad de la producción, y sobre todo el cuidado de nuestro más importante activo, que es la tierra.
En el segmento de compraventa de campos, ¿notan cambios en relación a las modificaciones macroeconómicas que introdujo el Gobierno? ¿Hay mayor o menor movimiento?
Vemos un mayor interés en la revisación de campos, pero de todos modos desde la compañía creemos que todavía las medidas son muy nuevas, y las buenas consecuencias tardarán en reflejarse.
En medio de una tendencia alcista para la soja y con agroexportadores que aumentaron las liquidaciones desde que comenzó el año, ¿creen que el campo sigue teniendo un rol protagonista y fundamental en la economía nacional?
El sector agropecuario es el único sector generador de divisas que genuina y rápidamente reacciona a las nuevas y positivas medidas. Esto se traduce principalmente en el caso de la producción granaria, en la cual es inmediato el aumento del área de siembra.
