El Economista - 70 años
Versión digital

vie 26 Abr

BUE 17°C

Según FIEL, volvió el populismo fiscal

“El Gobierno ha decidido 'quemar las naves' en aras de asegurar la reactivación de la economía”, dice el think tank.

04 julio de 2016

Ante la ausencia de brotes verdes y una “lluvia de dólares”, la política económica oficial decidió reactivar la economía a través un instrumento clásico (y criticado en su momento por el propio Gobierno): el gasto público expansivo. Eso sostiene un informe de FIEL dado a conocer en los últimos días.

“De la reactivación liderada por una 'lluvia de dólares' para inversión se pasó a una decisión de corte populista de motivar un aumento en el consumo aumentando los ingresos de más de dos millones de jubilados”, sostiene el informe. “El Gobierno ha decidido 'quemar las naves' en aras de asegurar la reactivación de la economía, dejando de lado la mejora gradual de las cuentas fiscales anunciada en enero”, añade.

Los cálculos de FIEL muestran que “la decisión de compensar a todos los jubilados de ingresos medios por la falta de ajuste en sus haberes en el período 2002-2006, hayan o no litigado contra la Anses, genera un aumento en el gasto público permanente del orden de 1,5% del PIB que está lejos de poder ser financiado por la mayor recaudación que se origine como consecuencia del aumento en la base imponible que genere el blanqueo de capitales”.

Más allá de las declaraciones de los funcionarios respecto de la importancia de balancear las cuentas públicas, sostiene el informe, “los hechos demuestran lo contrario”. A confesión de parte, relevo de pruebas: “Se han aprobado medidas con impacto permanente negativo en las cuentas públicas nacionales. Al aumento del gasto en jubilaciones, se suma la devolución del 15% de la masa coparticipable a las 24 provincias (no sólo a las 3 que tenían un fallo favorable de la Corte Suprema de Justicia) y propuestas para conceder incentivos fiscales a pymes y autopartistas, a pesar de que la experiencia internacional es bastante elocuente acerca de que los incentivos tributarios generan más costos a la sociedad que beneficios”.

FIEL concluye que la nueva senada fiscal oficial es “imprudente” y “deberá ser corregida a mediano plazo, no sólo para asegurar la solvencia de las cuentas fiscales sino también para ayudar a moderar el impacto macroeconómico de un déficit externo que ya es significativo y que se manifestará en toda su dimensión cuando se logre la tan ansiada recuperación”.

“La ilusión de lograr una reactivación económica de la mano de aumentar el peso del Estado en la economía y su nivel de déficit, a contramano de lo que requiere el crecimiento de largo plazo de la Argentina, también forma parte de un discurso facilista que hace muchos años mantiene nuestra dirigencia”, concluye el documento.

El dato positivo es que con el mayor estímulo fiscal, el Gobierno “se asegura la reactivación para el 2017”, acaso el objetivo del cambio de rumbo. La política económica, una vez más, se guía por las necesidades políticas y electorales del oficialismo de turno. ¿Cambiamos?

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés