por Luis Varela
Los mercados de aquí, de allá y de todas partes mostraron ayer que la situación financiera mundial sigue atada con alfileres. Con bajas de hasta 2,8% en casi todas las Bolsas, fuerte retroceso para la libra esterlina y desconfianza en algunas instituciones bancarias europeas, los inversores siguen buscando refugio, con un horizonte que todavía se mantiene repleto de nubarrones.
Ayer, después del impacto inicial que se había desplegado entre el 23 y el 27 de junio por e Brexit, y tras el feriado del lunes en EE.UU. por el día de su Independencia, los negocios volvieron amostrar que las cosas no están tranquilas.
El foco de la tormenta sigue estando en Gran Bretaña, que decidió abandonar la Unión Europea, y ahora empiezan a verse las pujas sectoriales, con la city londinense queriendo negociar a su modo, y con los mandamás de Alemania y Francia actuando en contrario. En base a esa puja, la libra esterlina volvió a caer y ya se devalúa este año casi tanto como el destruido peso argentino: el precio del dólar, tanto en libras como en pesos, crece en lo que va de este año nada menos que 13,5%.
Detrás de esto, los inversores de todas partes buscan refugio. Las monedas elegidas son el dólar en Occidente y el yen en Oriente. Ayer, salvo contra el yen, el precio del dólar subió entre 0,5 y 1,5% medido contra casi todas las monedas del mundo.
Paradójicamente, el único lugar, además de Japón, donde el dólar estuvo para abajo fue en la Argentina: el dólar oficial bajó 9 centavos, hasta $ 15,23 y el blue se achicó hasta $ 15 vendedor. El dólar mayorista y el contado con liquidación también estuvieron para abajo, cotizando a $ 14,82 y $ 14,98, respectivamente.
El motivo de esta baja fue explicado por los operadores por culpa exclusiva del blanqueo: muchos grandes inversores, amenazados por la AFIP, están posicionándose para blanquear con alguna ventaja, en un movimiento que hará bajar el dólar en la primera parte del ciclo y volverá a entonarlo firmemente una vez que los formularios hayan sido presentados.
Con los ojos en el dólar pero fundamentalmente en la inflación y en el nivel de actividad económica, el Banco Central volvió a bajar la tasa de interés de las Lebac. Ayer, en la habitual licitación de los martes, bajó la tasa 0,5%, hasta 30,25% para 35 días de plazo, al tiempo que mantuvo una curva descendente en las Lebac más largas, con tasas que van bajando desde 29 a 27% anual.
La autoridad monetaria, buscando facilitar el pago de los aguinaldos, también abrió la canilla a las entidades: redujo las tasas de pases pasivo y activo en 50 puntos básicos, a 26% y 35% respectivamente para operaciones a un día y a 27% y 36% para el plazo de siete días.
En este sentido debe advertirse que, de no mediar sorpresas, la de ayer habrá sido la última licitación de Lebac con plazos tan cortos. Aparentemente a partir del martes próximo los llamados se realizarán para términos más largos, con el mínimo a 60 o 90 días.
Con un marco de temblor externo y cuentas que no cierran a nivel interno, los inversores empiezan a tener dudas sobre los precios alcanzados por los títulos argentinos. Ayer el 68% de lo operado en bonos se transó en 4 títulos: AY24 22%, AA17 21%, DICA 13% y DICP 12%. Y, con esa base hubo una suba del 1 al 4,3% para los bonos BPLDD, TVPE, DICYC y PMN18 y una baja del 1,5 al 4,6% para los bonos BPLD, PMO18, AD16, AA46, AO20, DICA, AO16, PARY, DICY, CO17, AY24, TVPY, DIA0 y BPMD.
Pero donde más se notaron las bajas de los precios fue en el mercado bursátil. El 69% de lo operado en acciones se transó en siete títulos: Petrobras Brasil 27%, Cresud 16%, G.F. Galicia 8%, Banco Macro 8%, Pampa Energía 4%, YPF 3% y Telecom 3%. Y, con alto volumen negociado, la Bolsa porteña cayó 2,77%. En ese marco, los ADR en Nueva York mostraron mayorías de bajas, con pérdida del 1 al 4,7%.
La baja de las acciones argentinas fue un eco de lo que pasó en las Bolsas del mundo. Con eje en la tensión que se está viviendo en Londres, hubo descensos de hasta el 2,8% en casi todas las Bolsas de Europa y asia. Wall Street achicó entre 0,6 al 0,9%, y hubo una merma del 1,38% para la Bolsa de San Pablo y del 0,83% para la Bolsa de México.
La baja de las Bolsas obedeció a que con el Brexit son cada vez más los analistas que esperan un freno en la economía mundial, con menor actividad económica. En base a eso, ayer se registró un fuerte retroceso para el barril de petróleo, que terminó por debajo de los 47 dólares. También hubo mermas pero menores para los mestales básicos y números mixtos para los granos en Chicago (suba para el trigo, y bajas para la soja y el maíz).
Detrás de todo esto, el temor sigue ganando espacio. La onza de oro volvió a anotar una pequeña suba, pero la onza de plata, que el lunes había subido casi 5%, registró una pequeña toma de ganancias.
