Con mucho optimismo, el sector ganadero se reunió ayer en el marco de la 130º Exposición Rural para analizar lo que se viene en materia de producción y negocios. La jornada se denominó Carnes para la Argentina y el mundo, dado que el foco estuvo puesto en abrir mercados para recuperar la exportación, además de resaltar la necesidad de establecer estándares comunes para toda la cadena cárnica.
La figura estrella del evento fue, sin dudas, Ricardo Buryaile, ministro de Agroindustria de la Nación, quien anunció la creación de un sistema de control para garantizar la transparencia de la actividad, que hace años que sufre el impacto de la ilegalidad. Por eso, el ministro sostuvo que a partir de ahora el Gobierno Nacional se encargará de realizar “auditorías de trabajo”, ya que desde el oficialismo están “dispuestos a cuidar cada una de las cadenas y no queremos que haya irregularidades”. Para Buryaile, los productores deben tener “un mismo estándar de calidad e impositivo”, y garantizó que apuntará a “desburocratizar” el accionar del trabajo que realiza el Senasa, organismo al cual elogió.
Más producción
El evento de disertación contó con la participación del presidente de las Empresas Procesadoras Avícolas, Roberto Domenech; el titular de la Asociaciòn Productora de Porcinos, Juan Uccelli; y el presidente de la Cámara de Industria Frigorifica Argentina de Carnes y Subproductos, Jorge Martínez, entre otras personalidades que destacaron la importancia de producir más para optimizar ganancias. En ese sentido, los analistas Víctor Tonelli y Fernando Canosa mostraron gráficos en los que demostraron que el sector ganadero puede duplicar el volumen en diez o quince años si se consiguen las condiciones necesarias. Así ?explicaron? se podrían conseguir más mercados sin dejar de abastecer al mercado interno, que “consume muchísimas más proteínas que otros países también productores de carne”.
Buryaile, que cerró la jornada, salió a responder el pedido y aseguró que desde el Estado “vamos a poner las políticas de incentivo que hagan falta: crediticias, impositivas”. Asimismo, se mostró convencido de las oportunidades que se abren en lo que se refiere a las ventas externas. “Estas medidas sólo servirán si ganamos mercados internacionales. En este camino, vamos derecho a ingresar a los mercados de Estados Unidos y se nos está por abrir el mexicano, que es difícil. Esto se va a hacer sin dejar de proveer de productos al ámbito local, que es muy importante”, subrayó. Tampoco se olvidó de la carne aviar, para la que adelantó que analizarán la reducción del IVA a partir de los pedidos que elevaron las cámaras del sector.
La palabra de los supermercados Nicolás Braun, de La Anónima, pronunció uno de los discursos más comentados en los pasillos de Palermo. “Es verdad que los supermercados nos sobrepasamos al fijar el precio del asado por encima de los $ 90 en diciembre”, reconoció. “Nosotros no somos los malos, es el mercado el que nos obliga a colocar valores”, añadió. El empresario hizo un recorrido de la historia de La Anónima, que en 2013 ingresó al negocio de la ganadería y comenzó a vender el 65% en el mercado interno y luego a exportar el porcentaje restante.
